TERCERA RFEF

Andrés Rivero y Pitu plasman el dominio del Tamaraceite

El conjunto blanquiazul se muestra superior a un Buzanada que solo reacciona al final

Jugadores del ‘Támara’ celebran el 1-0 de Andrés Rivero –de espaldas–, ayer en el Juan Guedes.

Jugadores del ‘Támara’ celebran el 1-0 de Andrés Rivero –de espaldas–, ayer en el Juan Guedes. / Ramón Reguero

ACAN

Las Palmas de Gran Canaria

El Tamaraceite se colocaba ayer, provisionalmente, a cuatro puntos del primer puesto de la clasificación del grupo canario de Tercera RFEF, a expensas de lo que haga hoy el líder, Las Palmas Atlético, en el Anexo frente al Santa Úrsula (12.00 horas). Los blanquiazules se imponían a un Buzanada que continúa marcando la zona de descenso (2-0). Los de Iván Martín dominaron la primera parte y Andrés Rivero aprovechó el único despiste de la zaga visitante para abrir el marcador al filo del descanso. A la hora de juego, Pitu puso tierra de por medio para encarrilar el triunfo de un Támara que contrarrestó con éxito el cortó arreón del rival en la recta final.

El Tamaraceite asumió el control total de la posesión desde el inicio, pero se topó con un conjunto tinerfeño muy defensivo que juntó sus líneas y evitó la creación de llegadas claras, obligando a los locales a buscar disparos lejanos que no generaron ninguna sensación de peligro.

Ya al filo del intermedio, en el único despiste de una zaga que hasta el momento se mostraba intratable, Isaac colocó un centro desde la izquierda que Andrés Rivero cabeceó a la red desde el corazón del área. Seguidamente, aprovechando el bajón anímico del Buzanada, Saúl rozó el segundo tanto, pero su testarazo era repelido por el larguero.

El conjunto grancanario siguió llevando el peso del encuentro al regreso de vestuarios, jugando bastante cómodo y generando llegadas para ampliar diferencias en el marcador. El capitán blanquiazul, David García, protagonizaba la primera oportunidad clara de los locales. El veterano central remataba de cabeza un saque de esquina y el defensor Zeben sacaba el balón bajo palos.

Pasada la hora de juego sería el recién incorporado Pitu, quien con un tiro de vaselina haría el que a la postre sería el definitivo 2-0. A partir de entonces, el Buzanada se vio obligado a dar un paso al frente y se aproximó al marco de Galindo, que se mantuvo seguro bajo palos para conservar su marco a cero.

Por su parte, el Támara aprovechó los espacios dejados por el Buzanada para hacer daño a la contra, sin embargo, Andrés Rivero y Julio Rengel no supieron definir en el mano a mano y el resultado no se alteró.

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