Los diez nombres que componen la plantilla del Gran Canaria 2014, tras solventar con victoria el trámite del CB Granada, reconocen la dificultad de la empresa pero afrontan con mentalidad ganadora sus dos próximos partidos, en busca de una victoria que les permita formar parte del club de los ocho mejores, aquellos que entre el 10 y el 13 de febrero, disputarán en Madrid la próxima edición de la Copa del Rey.

Tomás Bellas advierte: "Obviamente son dos salidas complicadas con equipos clasificados entre los 16 mejores de la Euroliga". Valencia y Málaga separan al Granca del objetivo. El reto, asumido por la plantilla amarilla, pasa por lograr una victoria entre la Fuente de San Luis y el Martín Carpena, dos de las canchas más difíciles de la ACB, por lo que, ante la dificultad de la empresa, los jugadores hacen piña bajo una consigna: "Lucharemos hasta el final.

Una vez más estamos en la lucha por entrar en la que considero la fiesta de los grandes, un torneo al que por presupuesto no estamos invitados", reconoce el veterano Sitapha Savané, que en su séptima temporada con la entidad claretiana aspira a participar en su quinta Copa del Rey. "Para ello nuestra idea es ir a por todas en las canchas más difíciles", señala el aguerrido pívot senegalés, mientras que Carroll, Beirán y Nelson, tres nombres que sueñan con su primera participación, coinciden en ilusión. "No será nada fácil pero mientras quede la más mínima opción tenemos que pelearla hasta el final", asegura el primero. "Los partidos habrá que jugarlos hasta su final y si quieren ganarnos, tendrán que sudarlo", añade Nelson.

Ante la dificultad que supone jugar bajo la condición de visitante, Green, Bramos y Wallace, concurren en un dato; siempre han estado muy cerca de sus rivales locales. "Hemos demostrado estar cerca en los marcadores y todo es posible en los finales ajustados", señaló C.J. Wallace.

Valencia, con ocho victorias consecutivas, se presume como un rival casi inalcanzable con el añadido de contar con el apoyo de su grada. El factor del average, habitualmente escaso en el pabellón valenciano, puede ser a la postre un factor determinante cuando se prevén los empates en el balance de victorias y derrotas. Por lo que será en Málaga, frente al Unicaja, enemigo íntimo durante las últimas campañas, donde el equipo de Pedro Martínez se juegue el billete a la Copa del Rey. En el recuerdo positivo queda la victoria en tierras andaluzas en los últimos playoff por el título.