Ecosistema 23, llamada a la heroica. La UD Las Palmas, que concluye la primera vuelta con 23 puntos -a dos de los 25 que cifran la mitad de la permanencia-, dibuja las pautas de una segunda vuelta sin fisuras. En la pasada temporada, la 2009-10, el Cádiz, que también contaba con 23 puntos en la 21ª jornada, perdió la categoría en un final de infarto. Por su parte, el Girona, que también sumó la cifra maldita, logró una permanencia agónica en el último suspiro.

En el curso liguero 2008-09, el Deportivo Alavés también completó la primera mitad del campeonato con 23 puntos. Se marchó a Segunda B y aún lucha en las catacumbas del fútbol por recuperar su centímetro de gloria. En la citada campaña, el Córdoba CF, que contó con la dirección de Paco Jémez, logró la salvación final a pesar de concretar las primeras 21 jornadas con solo 21 puntos.

Y en la temporada 2007-08, la SD Éibar y el Granada 74 perdieron la categoría pero tras completar un botín suculento: 29 y 30 puntos, respectivamente. El Cádiz, que acabó con 28 puntos, también cedió la categoría. Tres casos que detallan la exigencia brutal del segundo capítulo de un planeta sin límites.

El Racing de Ferrol, que terminó la primera vuelta con 17 puntos, terminó en Segunda B. Si analizamos el final de la primera vuelta de la temporada 2006-07, los cuatro equipos que perdieron la categoría oscilaban en el baremo del maldito kilómetro 23. Vecindario (14 puntos), Ponferradina (21), Lorca (21) y Madrid Castilla (25) no lograron despertar en el segundo acto de la Liga.

En la 2005-06, el CD Tenerife terminó la primera vuelta con los 23 puntos. Logró la salvación tras encadenar un final de Liga épico con siete victorias. Y en la temporada 2004-05, la UD Salamanca sí perdió la categoría tras alcanzar el ecuador con 23 puntos. Una cifra que invita al esfuerzo, como ya recordó tras el 1-1 ante el CD Tenerife, el central Samuel. "Ahora empieza una nueva Liga, tendremos que esforzarnos el doble y estar muy atentos", valoró el zaguero.

Antecedentes positivos

La UD terminó con 23 puntos, tras la primera vuelta, en las temporadas 2007-08 y 2006-07. El 19 de enero de 2008 la formación amarilla, dirigida por Juan Manuel Rodríguez, doblegó 2-1 al Albacete con los goles de Christian Fernández y Sergio Suárez. Y de los 23 a la gloria. Juan Manuel Rodríguez supo dar con la fórmula bendita y los amarillos acabaron el curso liguero en la octava plaza -la mejor clasificación en Segunda con Miguel Ángel Ramírez en la presidencia-.

En la 2006-07, la UD acabó la temporada al borde del abismo: 18ª. Al término de la primera vuelta, los amarillos ocupaban puestos de descenso y con la sombra de la cifra 23.

Con 27 puntos se besó el ecuador en la campaña 2008-09. La UD sucumbió 1-2 en la 21ª jornada ante el Levante (1-2). Javier Vidales llevaba las riendas del cuadro grancanario. Los amarillos sumaban seis victorias y tan solo 22 goles en contra (ahora cuentan con 40). La UD acabaría ese campeonato con 10 victorias, 17 empates y 47 puntos. No fue necesario alcanzar la cifra mágica de 50.

Y en la 20ª jornada de la pasada temporada, la UD contaba con 26 puntos en su casillero. Es significativa la cifra de goles recibidos: 22. Con seis victorias, los pupilos de Sergio Kresic ocupaban la 13ª plaza en la tabla. A pesar de la serenidad defensiva, los grancanarios se encomendaron al GPS mágico de Paco Jémez para eludir el descenso en la última curva.

Pero la hemeroteca es cruel. En la campaña 2003-04, el curso del último descenso a Segunda B, la UD contaba con 23 puntos al término de la primera vuelta. Cuatro victorias, once empates y seis derrotas adornaban un expediente de fuego. Una vez más, y en la 17ª plaza, el número de goles en la casilla prohibida es inferior a 40. La UD había recibido 31.

Épocas de caviar

En las temporadas 1999-2000, 1998-1999 y 1997-1998, con la UD en Segunda, las cifras de goles a favor superan el registro actual de 30. Es necesario remontarse a una era de dominio y pólvora. En enero de 2000, el año del último ascenso a Primera y con Kresic en el banquillo, la UD sumaba 35 puntos y 33 goles a favor tras 21 partidos. En la 1997-98, se alcanza el Everest: 37 tantos anotados en 21 combates.

Jémez ya planifica la nueva era. Pistoletazo al cambio de guión. De su once más utilizado en la primera vuelta -ver cuadro-, Cejudo fue traspasado y Vitolo se recupera de su grave lesión. Toca congelar el paralelo 23.