Dos de los equipos más potentes de la Fórmula 1, Red Bull y Ferrari , han comunicado este viernes su decisión de abandonar la Asociación de Equipos de Fórmula 1 (FOTA), debido a discrepancias en cuanto a las medidas para reducir gastos en la competición.

La FOTA, concebida para crear un frente unido de los equipos en las negociaciones con Bernie Ecllestone y con la Federación Internacional de Automivilismo (FIA), se queda así en nueve miembros de las doce escuderías, ya que este doble abandono se une a la renuncia de HRT el pasado mes de enero.

"Ferrari ha informado al presidente de la FOTA, Martin Whitmarsh, de que abandona la organización. Esta decisión se ha tomado a regañadientes después de analizar la situación actual y el estancamiento a la hora de debatir sobre algunas cuestiones centrales por las que se formó la asociación, de la que Luca di Montezemolo fue su principal promotor", señala Ferrari a través de un comunicado.

La escudería italiana cree que se "debe volver a una situación en la que la Fórmula 1 sea realmente un banco de pruebas para la tecnología avanzada", de forma que los resultados "se puedan aplicar a los coches de carretera".

En este sentido, Ferrari lamenta que la Fórmula 1 sea "el único deporte profesional en el que es prácticamente imposible entrenar". "El número de días para entrenamientos debe aumentar para que los equipos se puedan preparar bien y para tener más oportunidades de acercar el deporte a los espectadores y los patrocinadores", reclama.

El vigente bicampeón mundial de pilotos y constructores, Red Bull, también ha confirmado su renuncia a la FOTA por desavenencias similares a las de su rival. "El equipo continuará comprometido para encontrar una solución en relación al ahorro de coste en la Fórmula 1", explica el equipo de Sebastian Vettel y Mark Webber.