El cierre patronal de la NBA, el lockout que enfrentó durante semanas a los propietarios de las 30 franquicias de la liga con el sindicato de jugadores, ya es historia y con la resolución del conflicto, con el 25 de diciembre como fecha marcada en el calendario para la celebración de la primera jornada del nuevo curso en la competición norteamericana, la diáspora de baloncestistas repartidos por todo el mundo concluye esta semana.

Con los campos de entrenamiento de la NBA a pleno funcionamiento a partir del 9 de diciembre, los jugadores ya han enfilado el camino de vuelta a casa. Y con su regreso a Estados Unidos, el nivel de ligas como la ACB se deprecia con la marcha de estrellas como Rudy Fernández, Serge Ibaka, Tiago Splitter o Goran Dragic, que este fin de semana jugaron sus últimos minutos en España.

Entre todos los equipos de la Liga Endesa, los clubes que apostaron más fuerte por reforzar sus plantillas con jugadores de la NBA en busca de un contrato temporal fueron el Real Madrid y el Caja Laboral.

La entidad que preside Florentino Pérez dio el gran golpe con las incorporaciones de Rudy Fernández, que ahora regresa a Estados Unidos para unirse a la plantilla de los Mavs de Dallas -actuales campeones de la NBA- y que incluso ya acordó con el Real Madrid alargar la vinculación contractual cuando finalice su aventura norteamericana, y de Serge Ibaka, al que ahora le toca reincorporarse a los Thunder de Oklahoma City.

Para contener la pérdida de Rudy o Ibaka, el Real Madrid se ha movido con celeridad para apuntalar su equipo con el fichaje de Kyle Singler, alero reclutado en verano por el Lucentum Alicante con el lockout como subterfugio.

Singler, campeón de la NCAA con Duke y elegido por los Pistons de Detroit -tras un intercambio con los Thunder- en el último draft, ha aplazado su desembarco en la NBA para convertirse en un jugador de referencia en el Real Madrid.

No es el club blanco el único que ve restado su potencial con el final del cierre patronal. El Caja Laboral pierde a Kevin Seraphin y Goran Dragic, el Valencia Basket se queda sin Tiago Splitter y el Fiatc Joventut se despide de Christian Eyenga.

Frente a la arriesgada apuesta de contratar a jugadores de la liga estadounidense, en movimientos con fecha de caducidad, destaca la firme convicción de Chichi Creus, director deportivo del Barça, de rechazar los ofrecimientos con caché NBA, tentación a la que sucumbió hasta el Granca con Rasual Butler en una operación que acabó en ruina total.