El entrenador del Real Madrid, José Mourinho, ha dejado claro que no existe "sentimiento de inferioridad" con respecto al Barcelona y que no cambia "con nadie" su situación después de haber sido el mejor equipo en la fase de grupos de la Liga de Campeones, ser colíder en la Primera División con un partido menos y en la víspera de iniciar la defensa de su título de Copa del Rey.

Así, el técnico dejó claro que en el seno del vestuario nadie considera que se haya acabado el mundo con la derrota en el clásico. "Si el mundo está cerca de acabarse no es aquí, ni por nosotros. Hemos dicho que ni ganar y estar a seis puntos, ni perder y estar igual nos haría perder nuestro equilibrio y tranquilidad. La gente del deporte, la gente competitiva sabe que ganar te hace más feliz y perder menos feliz, pero una cosa es más o menos felicidad y otra perder el equilibrio", argumentó.

"De verdad, no cambiaría nuestra situación con nadie. En 'Champions League', el mejor equipo de la historia en fase de grupos, en el campeonato ningún equipo tiene más puntos, miro para arriba y no veo a nadie y tenemos un partido menos. Así que o terminamos el año primeros igualados con el Barcelona o líderes en solitario. No cambio nuestra situación con nadie", recalcó.

Así, su arenga a la afición madridista es clara. "¿Mi mensaje? Dos palabras: somos líderes", sentenció, asegurando no preocuparse por el nerviosismo que haya generado en los seguidores el tropiezo: "No lo veo, no tengo tiempo para verlo, no es mi trabajo verlo, mi trabajo es mejorar e intentar ganar el próximo partido. A lo mejor es consecuencia de la dimensión histórica de este club. Es un club tan grande que cada derrota es un gran problema. La culpa la tiene la dimensión increíble que tiene este club".

Personalmente, recalca que su motivación es la misma. "Mi motivación tiene que estar a tope, teniendo el honor de que mi nombre esté al lado del de Miguel Muñoz por el récord de la historia del club más grande del mundo". "Don Miguel Muñoz y José Mourinho, los dos récords con 15 victorias consecutivas, récord en 'Champions' y líderes en solitario si hacemos un punto el sábado... y ¿me hablas de motivación?, resaltó.

Por otra parte, espera que a su equipo "no" le afecte la derrota en el clásico en el encuentro ante la Ponferradina porque "son partidos diferentes" y "competiciones diferentes", aunque sí sabe que, de salida, "la motivación del adversario será más grande".

"Hay que intentar reducir esta diferencia de motivación e intentar que mi gente pueda hacer un partido serio como el año pasado contra el Murcia en el primer partido. Haciendo un partido serio, empatamos, y jugando con muchos titulares, incluso Casillas, tuvimos muchas dificultades. Si miramos la historia reciente es siempre difícil como los equipos de categorías inferiores y mirando los resultados de los equipos que han jugado ya también", explicó, recordando la derrota del Atlético de Madrid y las victorias por la mínima de Barcelona y Athletic.

En cualquier caso, sí es cierto que el año pasado el luso apostó por el bloque titular, mientras que para este martes ha dado descanso a algunas de sus piezas claves. "El año pasado quería romper con una situación que venía de años anteriores como la derrota contra el Alcorcón... era muy importante dar un paso adelante y romper un poco con esto", argumentó.

"Además, en la convocatoria de mañana hay mucha gente. No está Fabio, pero jugó contra Ajax y Barcelona, ni Xabi Alonso o Benzemá que jugaron esos dos partidos... Nuestra convicción es que tenemos buen equipo. Suficiente no digo para sentenciar la eliminatoria, porque me parece complicado llegar y meter tres o cuatro goles, pero como mínimo crear un resultado que nos deje una pequeña ventaja para en casa poder sentenciar antes de irnos de vacaciones", añadió.

Otro de los que estarán en Ponferrada será Cristiano Ronaldo, porque Mourinho piensa que "puede ayudar a ganar un partido difícil", aunque elude pronunciarse sobre los silbidos que recibió el futbolista por parte de algún sector de la grada en el clásico.

"Si es como yo no escucha silbidos porque no da tiempo durante el partido. No sé si él lo ha escuchado, pero no me parece que sea un gran problema. Le ha afectado, pienso, tanto como a todos, perder un partido. Sin perder nunca el equilibrio emocional, es normal que esté más triste que hace 15 días, pero no veo ningún tipo de drama en su situación" expresó.

Y es que Mourinho no dudó en defender a sus futbolistas por su esfuerzo del sábado. "A la mayoría de los que jugaron el sábado ni los he visto. Están de vacaciones, merecidas, para la gente seria, que trabaja muchísimo y lo da todo. Y quien lo da todo, no está obligado a más y por eso han tenido dos días de vacaciones merecidísimas".

De hecho, desveló que la charla técnica fue la única que se vio sobre el césped y que ha durado "no más de cinco minutos". "Estaba explicando a los que van a debutar en la Copa del Rey y a los demás para recordárselo la historia del Real Madrid en la Copa y de la dificultad de la competición".

Mourinho, que no tiene "sentimiento de inferioridad" con respecto al Barcelona, tampoco se considera favorito. "No, eso quiere decir que hemos sido los mejores en la 'Champions' y no me pidas cambiarme en campeonato cuando somos los únicos que podemos ser líderes en solitario".

Para ello, todo pasa por sacar algo positivo ante el Sevilla en otro "partido muy difícil". "Hemos tenido meses de noviembre y diciembre como nadie, partidos con una dificultad extrema. Si en Sevilla empatamos llegamos con el título de campeón de invierno, que no me gusta nada, porque no tiene significado, pero llegar a diciembre primeros es una cosa fantástica", valoró.

Por otra parte, desveló que Varane, Sahin y Altintop serán titulares, pero que no se juegan más que el resto. "Varane, cada día que pasa tengo la convicción de que va a ser titular del Real Madrid diez años, de los 20 a 30. Es un gran jugador y es un niño, tiene 18 años, que parece que a veces nos olvidamos por su madurez. Los otros han pasado dos situaciones muy difíciles por las lesiones y todos necesitan jugar".

"Arbeloa no está todavía bien. No estaba bien para el sábado y ha estado en el banquillo porque tenía la sensación de que si el equipo le necesitaba estaría encantado de darlo todo, pero no está para jugar. Está cada vez mejor y creo que estará en condiciones de jugar en Sevilla o contra la Ponferradina para dejar atrás este problema definitivamente que arrastra desde Costa Rica", añadió sobre el defensa salmantino.