Diego Herner se encuentra en Argentina desde el pasado fin de semana. El central de la Unión Deportiva ha adelantado su viaje de Navidades para arreglar su visado de residencia y trabajo en España. El zaguero tiene previsto regresar a la Isla el próximo 29 de septiembre con toda la documentación en regla, según la versión que trasladó el club en su página web. El zaguero padece una lesión muscular, que lo tendrá alejado de los terrenos de juego hasta el año que viene, lo que ha favorecido que haya podido tomarse unas semanas libres para arreglar sus asuntos particulares. El problema burocrático con el permiso de residencia y trabajo de Herner es paradigmático en los extranjeros que ha fichado Las Palmas en las últimas temporadas.

Con la excepción de Edixon Perea en la campaña anterior, todos los futbolistas extracomunitarios contratados desde hace un lustro por la Unión Deportiva han debido regresar a su país de origen en un momento u otro de la campaña para solventar problemas con su documentación, un tema que resulta crucial para seguir desempeñando su labor en España.

Lo singular de estas ausencias temporales de los jugadores por problemas en su documentación es que se trata de un inconveniente que sólo parece afectarle a la UD, aunque el jugador del Rayo Vallecano Lass, también ha tenido que desplazarse estos días a Guinea Conakry por idénticos motivos. No hay descrito, al menos de manera pública, que otra insttitución deportiva profesional padezca los mismos problemas que la entidad amarilla o la rayista. En el FC Barcelona, que fichó este verano a Alexis al mismo tiempo que Las Palmas a Herner, Real Madrid u otro grande de la Liga no ocurren estas adversidades.

Hace justo un año, Mauro Quiroga, que también ocupa plaza de extranjero, tuvo que desplazarse a Buenos Aires para someterse al mismo proceso con la documentación. El delantero argentino solventó la papeleta burocrática en un mes exacto.

En el curso anterior, los damnificados fueron Fabián Assmann, que aprovechó ese tiempo para contraer matrimonio, y Salomón Rondón, quien aprovechó la ausencia para participar en el Sudamericano sub-20. El brasileño Amaral y el japonés Fukuda también pasaron por el mismo trance burocrático.