El español David Silva no pudo conducir hoy al Manchester City a la victoria en Stamford Bridge ante un Chelsea que supo desactivar el juego del canario y en el que su compatriota Juan Mata mantuvo el tipo para nutrir de balones al ataque de los "blues".

Silva se ha ganado en el primer tramo de la temporada los elogios unánimes de la prensa británica como líder de un equipo que hasta hoy no había perdido en la Premier League, pero esta noche vio cómo su privilegiada visión de juego no era suficiente para superar el fútbol físico del Chelsea.

La primera media hora del encuentro, con los de Roberto Mancini por delante en el marcador gracias a un gol temprano del italiano Mario Balotelli, fue propiedad del español, que guió a su equipo hacia el ataque y condujo el balón con la precisión a la que tiene acostumbrados a los aficionados del City.

En la reanudación, sin embargo, con el encuentro trabado y el Chelsea arrinconado en su campo esperando el contragolpe, el canario quedó anulado y acabó siendo sustituido por el holandés Nigel De Jong, un jugador con menos técnica pero más guerrillero, después de reclamar un penalti que podría haber cambiado el curso del encuentro.

Mata, por su parte, que no ha necesitado aclimatación a la liga inglesa y en un pocos meses se ha erigido como el puntal del Chelsea en el centro del campo, no disputó su encuentro más brillante, pero contribuyó a que el Chelsea se hiciera con una peleada victoria.

El técnico André Villas-Boas volvió a encargar a sus jugadores que retrasaran las líneas para esperar a los "citizens" en su propio campo y salir con velocidad al contragolpe, un sistema que desluce el juego del exvalencianista.

Villas-Boas, además, volvió a confiar en el joven exbarcelonista Oriol Romeu, que ya acumula cinco apariciones con los "blues" y se ha convertido en un bastión en el centro del campo.

Tampoco mostró su mejor nivel el argentino Sergio "Kun" Agüero, que tras unos primeros minutos eléctricos quedó olvidado en el ataque del City y no logró inquietar al guardameta Petr Cech.

El "Kun" fabricó el primer gol de los suyos en los primeros minutos pero, tras firmar un partido gris, fue sacrificado por su entrenador cuando el equipo se quedó con diez jugadores en la segunda parte.

En cuanto al español Fernando Torres, que parece haber perdido la confianza de Villas-Boas y que no ha jugado más que el tramo final del partido en los últimos choques, tampoco llegó a vestirse de corto esta noche, a pesar de que calentó durante unos minutos en la primera parte, cuando el marfileño Didier Drogba estuvo cerca de retirarse por unas molestias.