La cantera de la Unión Deportiva Las Palmas está de luto. El pasado domingo 8 de diciembre, el exportero amarillo Juan Antonio Angulo Amador, falleció. En su honor, el Estadio de Gran Canaria guardará un minuto de silencio el próximo sábado antes del partido que enfrentará a la UD contra el FC Barcelona B.

Angulo será especialmente recordado en estos tiempos, cuando el valor de los jóvenes canteranos amarillos está en alza dada la política del club de apostar por las jóvenes promesas del fútbol grancanario, ya que fue uno de esos futbolistas que salieron del filial.

Angulo llegó a la UD en la década de los cincuenta. Procedente del Artesano, se convirtió en uno de los jóvenes valores de la cantera y gracias a sus grandes cualidades como guardameta alcanzó en poco tiempo la titularidad en el recién nacido equipo filial, Las Palmas Unión Atlético, fundado en 1954 con Fernando Navarro como presidente.

Las grandes actuaciones del portero permitieron al equipo quedar campeón de la Liga Regional y alcanzar la gloria al ascender al primer equipo como tercer guardameta. Sin embargo, la gran experiencia y calidad del portero Pepín y el segundo guardameta, Antonio Betancort, le cerraron las puertas de la titularidad.

Angulo no llegó a disputar ningún minuto de competición oficial, pero sí jugó varios amistosos con el equipo B del club, llamado La Vela Chica, y viajó en tres expediciones de la UD cuando el equipo se codeaba con los grandes en Primera División.

En la temporada 1959/60, el portero dejó la disciplina amarilla y se trasladó a La Laguna, donde se instaló por motivos de estudios. Allí jugó con el CD Orotava, con el que se proclamó campeón de la Liga Interregional.

Al retirarse del mundo del fútbol, Angulo se instaló en La Aldea de San Nicolás y desempeñó una importante labor como empresario exportador y gestor inmobiliario.