Entre recortes e impagos de subvenciones, ¿el Olímpico corre el peligro de desaparecer?

No, no está en esa situación. El panorama es muy complicado, pero ahora mismo nuestra continuidad sólo depende de una cosa y no es otra que Bankia acceda a renovar una póliza de crédito que suscribimos desde hace bastantes años y que, en las últimas temporadas, nos ha permitido afrontar con liquidez el primer tramo de cada campaña. Hemos solicitado que este curso el importe se fije en 85.000 euros y ahora estamos en una fase de negociación, porque la primera intención de la entidad financiera es concedernos menos dinero del previsto. Y sin ese crédito no llegamos hasta marzo, que es cuando el Cabildo nos abona una ayuda de 30.000 euros.

¿Cuál es el problema? ¿Las subvenciones a cobrar de las administraciones públicas ya no sirven como garantía ante los bancos?

En los próximos días espero que este asunto se resuelva y podamos decir que no hay problemas para garantizar la continuidad del club. Durante los últimos ocho años el Olímpico ha movido en esa línea de crédito 3,5 millones de euros y siempre ha cumplido. Hace unas temporadas, el límite se fijó en 118.000 euros y se abonó cada céntimo. Ahora mismo tenemos pendiente de cobro unos 80.000 euros. Y en una situación así, tan difícil, sólo tengo palabras de agradecimiento para los grupos de gobierno del Cabildo de Gran Canaria y del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, que no sólo mantienen sus ayudas económicas, sino que además han realizado todo tipo de gestiones para ayudarnos.

¿Cuál es el porcentaje, del presupuesto para esta temporada, que cubre con subvenciones de las administraciones públicas?

Entre el cincuenta y el sesenta por ciento. El resto lo cubrimos con las cuotas de nuestros socios y con el apoyo de patrocinadores.

En una situación como la actual, en la que se ejecutan recortes hasta en política social, es difícil encajar un modelo de gestión deportiva como la actual.

Sí, sin discusión. Y el deporte canario necesita cuanto antes que se apruebe una ley de mecenazgo, similar a la que existe en el País Vasco, para sobrevivir. Nardy Barrios, presidente de Compromiso por Gran Canaria, ha redactado un proyecto que se debería estudiar. Si se ese plan saliera adelante se convertiría en la solución del deporte en Canarias.

Antes comentaba que su club estaba pendiente de cobrar unos 80.000 euros en subvenciones. ¿Que administraciones no han cumplido hasta el momento?

El Gobierno de España nos adeuda 25.000 euros por las ayudas al desplazamiento. Es dinero correspondiente a la temporada pasada y aún no ha realizado la convocatoria. El Gobierno de Canarias ya ha comenzado a pagar las subvenciones nominadas y ya ha fijado la convocatoria para los subsidios para viajes que le quedaban por abonar. Y entre noviembre y diciembre el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria se ha comprometido a liquidar el último pago que tiene pendiente.

¿Podría sobrevivir el Olímpico sin subvenciones?

Sí sería posible, pero a costa del primer equipo. Podríamos continuar nuestro trabajo con toda la cadena de filiales, pero el conjunto profesional no podría seguir en la Superliga Femenina. Se podría hacer, pero todas nuestras deportistas que militan en la base perderían el referente que sirve como motor para todo su esfuerzo y trabajo diario, el conjunto profesional. Y ese caso igual no tendría mucho sentido seguir. Esta temporada contamos con más de 300 jugadoras, repartidas, entre equipos federados y escuelas, en casi cuarenta plantillas. La cantera es nuestro sentido. La media de edad del primer equipo, este curso, es de 18.8 años, la más joven de toda la Superliga Femenina. Vale la pena esforzarse por este proyecto.

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