Después de un inicio que amenazaba con la ruina, tras acumular ocho jornadas consecutivas sin ganar y dejar a Sergio Lobera a un palmo del despido, la Unión Deportiva Las Palmas se ha instalado en la prosperidad. Acumula victorias -seis consecutivas, cuatro en Liga y dos en Copa-, puntos y buenas vibraciones, todo bien mezclado para suspirar por un futuro repleto de éxitos. Con todo a favor, sacudido por una inercia positiva, el equipo amarillo ha trazado la curva de la felicidad hasta llegar a un punto trascendental: el cruce con el Xerez, otro conjunto asentado a estas alturas de curso en un estado de ánimo tendente al optimismo.

El Estadio de Gran Canaria, hoy, a partir de las 18.00 horas (Televisión Canaria), será el escenario de un pulso entre dos equipos que llegan lanzados a la cita. Por un lado se presenta Las Palmas, que no pierde desde el 15 de octubre, cuando cayó con todo el equipo en Valdebebas frente al Castilla (3-2). Tras aquel indecente tropiezo frente al filial del Real Madrid, el conjunto de Lobera ha pasado por encima -uno tras otro- de CE Sabadell (1-0), Guadalajara (2-3), SD Ponferradina (1-0) y Hércules CF (0-2). Y en similar dinámica se mueve el cuadro andaluz que, después de caer eliminado en la Copa del Rey por la Unión Deportiva, llega a la cita a todo gas al encadenar seis jornadas consecutivas sin perder.

Con la fuerza y la seguridad que dan las victorias, el once titular de la UD Las Palmas empieza a tomar aspecto de bloque fijo. Sólo Stéphane Pignol, que la semana pasada se perdió la visita al Hércules por sanción, parece tener opciones de colarse como novedad en los planes de Lobera. El futbolista francés recuperaría su plaza en el lateral derecho y desplazaría a David García al eje de la defensa. Ese posible cambio provocaría el regreso de Deivid al banquillo.

No está en la convocatoria del conjunto amarillo Timothée Atouba, el lateral izquierdo incorporada esta semana a la plantilla. El internacional africano, con un plan de trabajo específico para adquirir el mejor tono físico, sigue a la espera de recibir el tránsfer del Ajax.

En el resto de las filas de la UD Las Palmas no se percibe ni un solo movimiento, nada que altere el ritmo competitivo de una máquina que acumula un mes de trabajo a pleno rendimiento sin fallo. Javi Castellano acumulará minutos como ancla de un grupo se que moverá al ritmo que impongan, en el centro del campo, jugadores como Nauzet Alemán, Vitolo y Momo, que hoy se reencuentra con su pasado más glorioso: el Xerez. La tarea de todos, con la pelota como común denominador, será habilitar a una pareja de ataque que, últimamente, no deja títere con cabeza.

Javi Guerrero y Thievy, en lo que va de temporada, ya lucen ocho muescas en la tabla de goleadores. El delantero madrileño, de golpe, ha despejado las dudas que el cuerpo técnico mantenía sobre su lugar en el equipo. Fijo en las alineaciones desde hace varias semanas, el capitán del grupo acumula cinco dianas, mientras que el atacante parisino suma tres y una multitud de ocasiones generadas.

Frenar al dúo que forman Javi Guerrero y Thievy será uno de los grandes retos que el Xerez, invicto en todas sus visitas al Estadio de Gran Canaria, tendrá que afrontar para superar con éxito el envite, un pulso al que se presentan con un serio problema de bajas: hasta seis hombres pierde Estaban Vigo, técnico del cuadro andaluz, para el duelo de hoy. Fuera de circulación, por diferentes causas, futbolistas como Israel o Vega, el entrenador recurrirá a Lucas Porcar y Marquitos para recomponer el once.