La Mesa de Contratación del Cabildo recibió ayer el informe de Esther Mateos -arquitecta de la propia corporación insular- sobre las ofertas presentadas, en base a los criterios subjetivos del concurso, por las siete empresas que pujan a la redacción del proyecto y la dirección facultativa de la obra para aproximar las gradas al terreno de juego en el Estadio de Gran Canaria. Y entre todas las propuestas realizadas, la mejor valorada por la técnica de la administración pública fue la elaborada por Icau Estudio.

El despacho grancanario toma así ventaja en un proceso que ayer consumó otro paso más para eliminar las pistas de atletismo del Estadio de Gran Canaria con la apertura de las plicas con las ofertas, en base a los criterios objetivos, de las siete sociedades que aspiran a dar forma a un proyecto que ha alentado la UD Las Palmas y que ha encontrado total apoyo por parte del actual grupo de gobierno del Cabildo.

La puntuación de los criterios subjetivos, el apartado en el que Icau Estudio obtuvo la mejor valoración por parte de la arquitecta de la corporación insular, fija el estudio previo del proyecto, en el que se evaluará a partes iguales la mejor definición de cada uno de los cinco capítulos que contiene. Este apartado del concurso supone como máximo la suma de 40 puntos -de 100 en total- en la calificación final.

Los 60 puntos restantes se contabilizarán a partir de las ofertas realizadas por las siete sociedades concursantes a partir de sus proposiciones de criterios subjetivos, apartado compuesto por dos puntos: la oferta económica (40%) y el plazo de entrega del proyecto de ejecución (20%). En este capítulo, la más baja de las proposiciones financieras -sin ser temeraria- obtendría la puntuación más alta.

En la apertura de los sobres, realizada ayer en las instalaciones del Cabildo, sobresalieron tres ofertas -entre las siete empresas concursantes- que rebajaron sustancialmente a la baja el precio inicial fijado por la administración pública para tasar la redacción del proyecto que aspira a acercar las gradas al césped. Toda esa documentación pasará ahora a los técnicos del Instituto Insular de Deportes, que calificarán cada propuesta de criterios objetivos, valoración que sumarán la puntuación ya realizada de los criterios subjetivos para elegir la mejor idea.

Al convocar el concurso, el Cabildo estableció el importe de la licitación en 192.000 euros, cantidad a la que se suman otros 13.440 euros en concepto de IGIC aplicable. De esa cifra, el cincuenta por ciento se invertirá en honorarios por la redacción de la idea y el otro cincuenta por ciento en la remuneración de la dirección facultativa.

La aspiración de la UD Las Palmas dispone que la operación podría costar 2,4 millones de euros, una cifra que desembolsará la corporación insular como propietaria de la instalación. Con la obra, el aforo contaría con 2.400 asientos más -pasaría de 32.000 a 34.400 localidades-. La propuesta pretende instalar una estructura de gradas fijas, implantadas y desmontables, que cubra -desde el pasillo central del anillo- la actual zona baja del graderío, con lo que el ángulo de caída respecto al campo sería menor. La intervención afectaría a las gradas Tribuna, Sur y Curva, ya que delante de Naciente se levantará una galería independiente y en paralelo que condenaría al anfiteatro actual.