"Objetivo cumplido". Ésta fue la frase emitida por los miembros de la recuperada Escudería Drago, para felicitarse por la brillante celebración de la XVII Subida de Juncalillo, al reunir, 41 años después de su primera edición, a una gran parte de la historia viva del automovilismo canario y que dedicó también su tiempo para la memoria con el homenaje a Manuel Rodríguez El Vaquero, en una jornada marcada por el reencuentro de viejos rockeros que contaron sus batallas deportivas en este deporte a los más jóvenes.

Juncalillo ha sido el punto de partida para la renovación de la amistad y la unión del automovilismo en un día en el que predominaron los abrazos y que tuvo como premio el rejuvenecimiento y la ilusión vivida para muchos de los pilotos veteranos. Éste fue el gran atractivo que atrajo miles de aficionados que acudieron al pequeño pago de Gran Canaria al llamado Espíritu de Juncalillo, lo que motivó que colapsaran todos los huecos de aparcamientos, tanto en el trazado como a más de tres kilómetros de los accesos al recorrido.

En esta ocasión el apartado de competición quedaba relegado a un segundo plano, dado que como expresó Hilario Gómez, veterano piloto en activo y presidente de la entidad organizadora "la camaradería ha sido el propósito marcado para disfrutar de la amistad que perdura tras los viejos tiempos vividos. Ha sido un día maravilloso y, a partir de ahora, trabajaremos intensamente para mantener la unidad del automovilismo actual arropado por la experiencia de los más veteranos. El futuro se cultiva con las raíces del pasado".

En lo deportivo, el día comenzó con llovizna y niebla, la misma circunstancia climatológica de hace 41 años, para dar paso luego a una soleada tarde en la que la victoria en el apartado de turismos fue para Modesto Martín con su Porsche 911 GT3, que marcó su mejor tiempo en 2:39.440, seguido de Miguel Cabral (EVO-VI) CON 2:42.235, completando el podio el ganador del grupo N, Gustavo Bolaños (EVO-VII), con un crono de 2:47.792, mientras que José María Ponce (BMW M-3), se hacía con la cuarta posición y un tiempo de 2:49.264, primera montura de propulsión y que debido a este hándicap sus tiempos no mejoraron debido a lo delicado del pavimento.

El joven Alexis Santana (Renault 5 GT turbo) realizó una ascensión soberbia que le situó en la quinta plaza con un crono de 2:50.903, seguido de otro de los perjudicados por la climatología, Miguel Quintino (BMW M-3) con 2:54.486 y Osmundo Ramírez (Renault) con 2:58.467, en tanto que Juan Fco. Alonso (VW Polo S1600) acabó octavo con 3:00.025.

Dos de los veteranos participantes, Raúl Santana (Honda Civic) y Diego Suárez (Honda Civic), culminaban en las posiciones novena y décimosexta, respectivamente.

Los vehículos históricos fueron los más aplaudidos por el público, siendo el vencedor en este apartado Tato Suárez con su admirado Ford Escort MKII con un crono de 2:59.583, seguido de Santiago García (Opel Ascona SR), 3:01.290 y Rubén Padrón (Seat 124-2000), 3:03.502.

El tinerfeño Melchor Dávila (Renault 5 Turbo) finalizó séptimo con un crono de 3:12.795, mientras que Carlos Padilla (Toyota Célica GT/TA-22), 3:14.529, lo hacía en el puesto undécimo.

En Regularidad Sport y en media alta, el triunfador fue Roberto y Diego Rodríguez (Toyota 1000) con 9.8 puntos de penalización, siendo segundo César Estévez-Beatriz Cortadella (Mazda RX7) con 11.9, completando el podio el tinerfeño Paco Sánchez-Francisco Marín (Ford Escort MKI) con 26.7 puntos, dado que Hilario Gómez-Aníbal Montesdeoca (Lancia Fulvia) fueron cuartos con 29.6. En media baja el ganador fue Kike Álvarez-Chago Díaz (Porsche 911 SC) con 7.9 puntos.