El Binter de la ilusión. La UD Las Palmas detalló ayer su plan de viaje para Almería, de cara al partido de este domingo, desde las 18.00 hora insular -y con las cámaras de Canal Plus- en la vuelta de la primera eliminatoria de ascenso. Los jugadores, cuerpo técnico y directivos de la entidad amarilla volarán a la ciudad andaluza en un avión de la compañía Binter la tarde del sábado y tienen pensado regresar la noche del domingo, tras el encuentro.

Sin embargo, la negativa de adelantar una hora el encuentro por parte de la UD Almería, hace peligrar el despegue en la misma noche del domingo, en el caso de que se tenga que llegar a la disputa de una prórroga [que supondría media hora más de juego]. Con el tiempo suplementario, los amarillos tendrían un margen escaso para viajar al aeropuerto, que cierra sobre la medianoche, y volar a Gran Canaria.

Patricio Viñayo, director general de gestión de la UD Las Palmas, explicaba la hoja de ruta del equipo grancanario, que busca su pase a la gran final por una plaza en Primera, categoría que no pisa desde mayo del 2002. "Solo se ha logrado un avión de 50 plazas. Binter es la que pondrá alas a los sueños del equipo, hemos logrado una acción promocional que nos permitirá costear el viaje. Es imposible llevar al equipo de otra forma, si no queremos ir a Madrid, siete horas de guagua y es lo único que hemos podido obtener. Saldremos el sábado por la tarde y queremos llegar el domingo", detalló en Canarias Radio La Autonómica.

Por otro lado, Viñayo aseguró que, ante la imposibilidad de poder brindar un vuelo charter con capacidad para gran parte de la afición que se desplace de la Isla a Almería, el club amarillo se compromete a facilitar la entrada de forma gratuita al estadio del Almería. "Todos los aficionados que notifique que van al Estadio del Mediterráneo, les facilitamos las entradas, es una cortesía del Almería, tras el desencanto", en alusión al cambio de horario que sufrió el partido y que dejó a decenas de fieles amarillos sin opción de buscar una nueva fórmula. "Es la reparación que podemos obtener de la Liga de Fútbol Profesional", argumentó el directivo, a los fieles que se desplacen a animar a la UD.