Madrid, Tokio y Estambul, las tres ciudades aspirantes a organizar los Juegos Olímpicos de 2020, salieron de sus presentaciones ante la asamblea del COI con una parecida sensación de entusiasmo, confiadas en haber convencido a unos votantes que, con raras excepciones, aún se guardan su opinión.

A apenas dos meses de la elección de la sede -el 7 de septiembre en Buenos Aires-, Madrid y Estambul de forma más abierta y Tokio, en un tono más contenido, consideraron que habían superado el escollo de hoy sin tropiezos.

La presencia en la delegación española del príncipe Felipe fue un golpe de efecto a favor de Madrid. Los miembros del COI se han turnado para saludarle y departir con él desde su llegada en la tarde del lunes a Lausana.

En la comida de hoy, que el COI compartió con algunos representantes de las candidatas, don Felipe se sentó junto al presidente del organismo deportivo, el belga Jacques Rogge, con el que coincide en su condición de regatista.

En su intervención ante la asamblea, el Príncipe subrayó que no estaba en Lausana por "una formalidad ceremonial", sino porque es "olímpico" y cree en los beneficios que unos Juegos en Madrid reportarían a las nuevas generaciones.

El ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, que defendió la capacidad española para organizar los Juegos, celebró como una buena señal que nadie hubiera sacado a relucir el tema económico en el turno de preguntas.

"España genera mucha más confianza y credibilidad que antes", dijo. "Mi intervención se ha basado en la realidad de la economía española", apuntó el ministro, "que está dejando la crisis atrás, con un efecto importante de generación de confianza en los mercados".

Las preguntas que formularon a Madrid los miembros del COI, lejos de ponerles en un aprieto les permitieron subir nota, al referirse a temas ya resueltos, como la nueva legislación antidopaje o el precio de los hoteles, o a capítulos amables, como la herencia de los Juegos de Barcelona'92.

También satisfechos se mostraron el presidente de la candidatura, Alejandro Blanco, y la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, aunque huyeron del triunfalismo. "La celebración, si la hay, será el día 7 de septiembre", dijo Botella. "Hay que seguir trabajando", apuntó Blanco.

"¡Una presentación muy potente!"

Al término de la intervención de Madrid, algunos miembros del COI mostraron su admiración.

"¡Una presentación muy potente!", comentó a Efe el singapurés Ser Miang Ng, vicepresidente del organismo y candidato a presidir el COI.

Estambul abrió el fuego por la mañana con la sombra de las protestas antigubernamentales en Turquía rondando sobre su candidatura.

Ningún miembro del COI preguntó al respecto -"no era el lugar", dijo el español José Perurena-, aunque el viceprimer ministro de Turquía para Asuntos Económicos, Ali Babacan, aseguró que él mismo habóa abordado el tema para aclarar que su Gobierno garantiza las libertades y derechos fundamentales.

Añadió que la reacción de la policía fue "proporcional" a los actos de violencia provocados por "organizaciones ilegales" y admitió que en algún momento la policía pudo cometer "errores".

"Se hable o no se hable de este tema", dijo un votante, "el tema de las manifestaciones está ahí y entre nosotros lo hemos comentado".

La candidatura turca basó su presentación en la pujanza de su economía y en el porcentaje de población joven del país, aunque un miembro del COI lamentó confidencialmente que en su intento de mostrarse como un país occidental hubiera obviado en sus vídeos, por ejemplo, a las mujeres que se cubren con el velo.

"Estamos absolutamente confiados en que nos van a atribuir los juegos", dijo el viceprimer ministro luego en conferencia de prensa.

Tokio hizo, por su parte, una presentación excelente, pero su respuesta a las preguntas posteriores y su conferencia de prensa no estuvieron a la misma altura, coincidieron varios miembros de la asamblea.

La capital japonesa presentó una iniciativa internacional para apoyar el deporte en el exterior y luchar contra el dopaje.

El viceprimer ministro y antiguo deportista olímpico Taro Aso se mostró satisfecho de la presentación realizada y dijo que, después del desastre nuclear de Fukushima, organizar los Juegos Olímpicos sería como convertirse en "el ave fénix que renace de las cenizas".

"Con Fukushima quedó la impresión de que éramos un país destruido, pero queremos mostrar al resto del mundo que hemos salido adelante y que esto se convierta en un mensaje de esperanza y aliento para el futuro", enfatizó.

La candidatura tuvo incluso el valor de reflexionar en voz alta sobre si habría un tercer proyecto consecutivo en caso de derrota. El director general Masato Mizuno, aseguró que los japoneses están "apasionados" ante la posibilidad de ganar estos juegos, pero en caso contrario, dijo, "seguiremos mejorando".

Las tres candidatas, "muy profesionales"

El irlandés Patrick Hickey, miembro del COI y presidente de los Comités Olímpicos Europeos, manifestó al término de la jornada que las tres candidatas habían sido "muy profesionales".

"En esta presentación no ganas votos, pero los puedes perder. Y no creo que ninguna de las tres lo haya hecho", afirmó.

"No creo que las manifestaciones en Turquía sean decisivas. Todos los países del mundo tienen manifestaciones. Vivimos cambios constantes", aseguró Hickey.

El puertorriqueño Richard Carrión se mostró convencido de que "no habrá una ganadora en primera ronda" y que el 7 de septiembre se irá "a dos votaciones".

"Nunca se sabe, pero es mi predicción", afirmó.

Carrión, uno de los seis candidatos a presidir el COI cuando en septiembre se retire Jacques Rogge, señaló que las tras candidatas habían presentado imágenes "espectaculares" de sus ciudades y que habían conseguido emocionar "a un tipo blando" como él.