Abanico de talento. La encrucijada de Lobera. De la magia de Valerón a la contundencia de Asdrúbal,el estratega tendrá que definir su libreto para firmar el primer éxito liguero. Abrazar un régimen de gloria y salir de la era de las tinieblas. Liderados por la impronta del mesías Apoño, la UD Las Palmas busca esta tarde, desde las 17.00 horas -y con las cámaras de la Televisión Autonómica-, la primera victoria liguera ante el recién ascendido Real Jaén. Es preciso un ejercicio de contundencia para recuperar las credenciales del nuevo proyecto, y dar carpetazo a un inicio gris. Y hoy se alza el telón de la resurrección amarilla con un millar de incógnitas en la definición de un once, repleto de glamour. Con las únicas bajas de Hernán y Atouba lesionados, los amarillos retan al Jaén para dar con el Santo Grial.

Con el torrente de luz, de la exhibición en la Nova Creu Alta, en la segunda ronda de la Copa del Rey ante el Sabadell, y el feliz hallazgo de un líder en la sala de máquinas, el cuadro isleño tratará de poner fin a la ausencia de gloria en el templo del Gran Canaria. Y todo apunta que lo hará con Apoño, un portento de furia y técnica, que ha llegado para rescatar a un escudo, que naufragó en las primeras cuatro semanas del campeonato.

La última victoria en duelo liguero en la Isla se remonta al pasado 2 de junio, en la disputa de la penúltima jornada del curso 2012-13 ante el CD Numancia. Con el navío amarillo al borde del precipicio de los puestos de descenso, toca reacción y aplausos. No hay otra.

Tras cuatro tropiezos en el campeonato liguero, que se han saldado con una derrota y tres empates, los amarillos miden su arsenal ante un rival dócil, que ha encajado ocho goles lejos de su estadio La Victoria. Ahí radica la debilidad del conjunto del técnico Manolo Herrero, que recibió cuatro estocadas en Los Pajaritos de Soria (4-2) y otras cuatro puñaladas en el Ángel Carro de Lugo (4-2).

Se presenta un duelo a muerte con el viento a favor, para lucir la categoría de un vestuario revolucionado tras las llegadas, sobre la bocina, de Carlos Aranda, Masoud y sobre todo, Apoño, que hoy llevará las manijas del equipo junto al emperador del proyecto, Juan Carlos Valerón, que descansó por primera vez en Sabadell. Ver a los dos centrocampistas configura el mayor atractivo de esta quinta jornada. Así como definir el núcleo ofensivo. No hay margen para más probaturas ni ejercicios de laboratorio, ganar es una obligación.

Con el meta Mariano Barbosa, que afronta su mejor momento profesional, en su cuarta campaña en la Isla, como líder de la muralla, Galán -titular ante el Numancia- actuaría de lateral derecho. Avalado por Lobera, el ex del RCD Espanyol y Xerez cumplió en Soria y hoy debe confirmar su valía.

Deivid, Aythami Artiles y Xabi Castillo completarían la retaguardia. Si se confirma la titularidad del exlateral del Athletic de Bilbao, sería la primera vez que actúa de inicio en el Gran Canaria. El de Durango fue de los más destacados ante el Sabadell, aunque también espera por una oportunidad Dani Castellano, que se ha esfumado de la titularidad en los dos últimos partidos oficiales de competición.

Apoño y Vicente Gómez, un tándem para el éxito, mantendrían el equilibrio, para ceder, a Juan Carlos Valerón la única responsabilidad de fabricar magia. Crear espacios para Asdrúbal -la gran sensación del inicio de temporada con dos tantos- y ´Macky´ Chrisantus. Como tercer mosquetero, el pistolero Nauzet Alemán, que firmó el 1-1, con un penalti exquisito.

Masoud y Carlos Aranda, que debutaron en el triunfo copero, esperarían una oportunidad en el banquillo, para confirmar que hay fondo de banquillo para luchar por el ascenso. Sin obviar, la capacidad de revulsivo de la que gozan Momo o el murciano Tato.

Cabe reseñar que tras el examen ante el Jaén, la UD encara dos paridos lejos de la Isla, ante Girona y Lugo, lo que enciende la necesidad de aniquilar al cuadro andaluz.

A la necesidad de estrenar el casillero de victorias, los amarillos buscan sellar la paz con su afición. Un tratado de armonía desde la pólvora. El último desliz ante la SD Éibar, en el que el canterano Asdrúbal evitó el naufragio con un tanto en el último minuto, vino acompañado de una sonora pitada. La inocencia del Jaén y ante el peligro de caer a los puestos de descenso, Lobera busca hoy el partido perfecto.

Metamorfosis

En los dos últimos partidos en el Gran Canaria, la UD, repleta de lagunas, ha buscado sin éxito, un patrón de juego. Pero será ante el Jaén, cuando Lobera tenga la primera oportunidad en Liga de alinear a Apoño, Nauzet Alemán y Juan Carlos Valerón. Se trata de tres de los jugadores con más talento de un vestuario, que hará de la posesión y el control, su principal virtud. "Debemos encontrar el equilibrio, es nuestra obligación. Y estamos cerca", ha declarado Lobera, en la previa.

De la UD que estrenó el campeonato ante el Deportivo, que solo tuvo quince minutos de poesía, a la estructura actual, radica un abismo. Momo, Tato y Máyor, titulares aquel 17 de agosto, hoy lucen un rol secundario en el proyecto. En ese giro hacia la estética diabólica, los citados Apoño, Valerón y Nauzet deben portar el estandarte de un conjunto, que por nombres, debe lidiar en la zona noble.

A la quinta debe llegar la vencida. La UD más ambiciosa de los últimos años, con su elenco de figuras, reta al frágil Jaén. No habrá red. Victoria o catarsis. El ensayo de Copa, con Apoño y Masoud como destacados, marca el camino. Una brújula de oro que apunta a Primera. Se busca una lluvia de goles, para enterrar la depresión.