Fuera del hábitat natural y con dos puntos menos que en el ecuador de la pasada edición liguera. La UD Las Palmas, la del lujo y caviar con fichajes como Juan Carlos Valerón, late con cierto desencanto. La versión más ambiciosa de las últimas temporadas del navío amarillo da carpetazo a la primera vuelta fuera de los puestos de promoción de ascenso a Primera y con 31 puntos [empatados con el Numancia, que ocupa la sexta plaza pero que supera en el gol average a los isleños]. Con ocho victorias, siete empates y seis derrotas, y un balance de 23 goles a favor y 22 en contra, la UD del ´caballo trotón´, como la bautizó su presidente Miguel Ángel Ramírez, necesita mejorar. Acaricia el aprobado pero un final de la primera vuelta gris, ha lastrado las opciones de gobernar la tabla con autoridad.

Los amarillos suman una victoria en las últimas seis jornadas [ante el Recreativo de Huelva en el Nuevo Colombino en el último punto kilométrico de 2013]. El diciembre negro fue una losa gigante, que dinamitó el sueño de alcanzar el liderato. Porque antes del inicio de la dinámica negativa, que arrancó ante el Zaragoza, el 30 de noviembre del pasado año en el Gran Canaria, la UD tenía en su punto de mira la segunda plaza. Pero en al citada fecha se precipitó la gran depresión, que salvo el oasis de Huelva, ha dejado un desolador guarismo de tres derrotas y dos empates. El caos que se vive en la tabla, los de Lobera están a solo cinco puntos del líder Deportivo, permite creer ciegamente en el ascenso. Un triunfo, el próximo domingo en Riazor, ante el primer clasificado, dejaría a la tropa amarilla a tiro de la codiciada plaza. Pero bajo el prisma optimista, hay aspectos que mejorar.

Sergio Lobera, responsable técnico del portaaviones isleño, valora que están "en el camino" pero receta una tonelada de ambición. "La valoración de la primera vuelta es positiva; estamos en el camino. Al inicio de temporada nos marcamos un objetivo, que era intentar igualar o mejorar lo del año anterior [el equipo promocionó y sucumbió en la primera criba ante el Almería] (...) El equipo está en una posición de exigencia, y por lo tanto nos planteamos que podríamos estar en un puesto mejor".

En el pasado curso, también con Lobera al mando, la UD concluyó en la sexta plaza, al término de las 21 primeras jornadas. Los amarillos computaron 33 puntos y alcanzaron el ecuador en la sexta plaza y en puestos de promoción.

Y en el discurso del preparador, la idea es dar un salto hacia la zona noble y convertirse en los reyes del segundo tramo de la Liga. "En líneas generales, el equipo tiene que ir creciendo, la segunda vuelta es la fase más importante del campeonato. Siempre somos ambiciosos, y al equipo se le puede exigir más. Hay aspectos mejorables...Los números que tenemos en casa [los amarillos han perdido el 50% de los puntos que han disputado en casa: 15] y otros aspectos desde el punto de vista futbolístico. Esperemos recuperar jugadores -acudieron a Ponferrada con seis bajas-. Pero el balance de la primera vuelta es positivo, reconociendo que aún existe un margen de mejora", concretó el técnico.

En lo referente a la faceta realizadora, la UD (23 goles en 21 encuentros) ocupa la 15ª plaza en la tabla de los equipos con más pólvora del universo de plata. No es un buen registro, para un sello ultraofensivo, que cuenta con generadores de peligro como Nauzet Alemán, Masoud o Juan Carlos Valerón.

La soledad del pistolero

´Macky´ Chrisantus es el máximo realizador de la primera vuelta en la UD con ocho dianas -entre Liga y Copa-. Valerón y Nauzet aparecen en segundo lugar con tres, como dos alternativas fiables. La aportación de Carlos Aranda (1 solo gol), Máyor (1) y Delev (0), que se contrataron para el frente ofensivo como refuerzos de calidad, conforma una de las grandes decepciones. Ello ha provocado la irrupción de dos valores de la casa como Asdrúbal (2 tantos en su zurrón) o Tana (también con 2).

Ante la crisis en la faceta anotadora, ha aparecido como remedio de primer orden la clase de Masoud. El internacional iraní, que participará en el próximo Mundial de Brasil, dejó para la galería un tanto fantástico ante el Mallorca. Un gesto que define el nivel de un plantel que aún lejos de su mejor versión. Aún falta el despegue.

En lo referente al minutaje, el meta Barbosa concluye la primera parte de la Liga como el jugador más utilizado (1.729 minutos), con el canterano Vicente Gómez en segundo posición (1.661). El mediocentro, alentado por la veteranía y el embrujo de Apoño, está completando un curso notable. Su crecimiento, a los estrenos de Asdrúbal, Tana y Leo, reafirmar el peso de la cantera en el proyecto de Sergio Lobera.

Obligados a colarse en el pelotón de cabeza, la UD arranca el segundo acto ante el ´Dépor´. Un examen de órdago, para un bloque en construcción, que ha sufrido números reveses en forma de bajas y sanciones [como la de Apoño que estuvo seis jornadas ´ko´].

Estirar el juego total de un conglomerado de artistas y buscar un asesino de área, que se complemente con Chrisantus, se perfilan como los primeros desafíos. Son las cuentas de un equipo que está fuera de su zona. Pero es una anécdota. Restan 21 finales.

Más tareas pendientes

Si la UD tiene deberes para la segunda vuelta, como asaltar y recuperar su puesto en la zona de promoción o de ascenso directo, para agotar la meta de besar la Primera, en los despachos también hay trabajo extra. Las altas de Delev, Máyor y Aranda no han respondido a las expectativas. Solo Chrisantus se ha ganado a pulso la condición de pistolero titular de la nave amarillo. Con el mercado invernal abierto, los despacho de Pío XII analizan todas las situaciones con frialdad. El ´caso Delev´ aún sigue sin resolverse. Tras anunciar que quería abandonar la nave, desde la UD se asegura que siguen a la espera de una buena oferta.

La desesperación de la bala búlgara -imagen- escenifica la impotencia de unos refuerzos, notables en lucha, pero invisibles en la aportación anotadora. En la UD no se riden: "Estamos convencidos de lograr el ascenso", se asegura en la dirección deportiva. El sueño de un pueblo sigue latente. Y se esperan nuevos inquilinos.