Bendito problema. Paco Herrera, responsable táctico de la UD Las Palmas, tiene calidad y cantidad donde elegir para conformar su once titular en un equipo con un mínimo de dos jugadores por puesto. Pero ahora, con la recuperación de jugadores lesionados, como Christian Fernández y Marcelo Silva, la incorporación del portero Casto y la forma y posibilidades de Guzmán Casaseca, Juan Carlos Valerón y Jesús Valentín, la competencia aumenta y las decisiones se complican un poco más en los esquemas del técnico amarillo. Y es que los protagonistas de la Copa del Rey tocan con fuerza en la puerta del entrenador.

Salvo en la delantera, demarcación que ocupa un Sergio Araujo que se ha erigido en pichichi y protagonista estelar del inicio liguero, todas las posiciones están sujetas a debate en la actual Unión Deportiva Las Palmas. Paco Herrera aprovechó la segunda ronda de la competición copera para repartir minutos bajo una premisa. "Quiero que me demuestren que me equivoco con las alineaciones", aseguró el motivador amarillo. Dicho y hecho. La plantilla es extensa y apenas importa el nombre del titular cuando el rendimiento es optimo en cualquiera de los casos.

Durante la últimas temporadas, la portería amarilla ha sido propiedad única y exclusiva de Mariano Barbosa. Tan solo al faltar el arquero argentino podía dar una oportunidad al resto. Sin embargo, este curso dos arqueros lucharán por un puesto que no admite cambios ni siquiera rotaciones según el manual de mucho entrenadores. Hasta el momento, el gran canario Raúl Lizoain se ha mostrado seguro en la tarea y con cada nuevo partido transmite mayor confianza. Ha encajado un gol en tres partidos, realizando cinco paradas y varias salidas de mérito. Es un portero de la casa y cuenta con el apoyo de la grada. Pero, el club ha fichado a Casto Espinosa, que llega como un refuerzo importante tras hacer una buena temporada con el Real Murcia. Debutó en Primera con el Betis y llegó a ser elegido como el portero de la jornada por el prestigio diario L´Equipe tras una memorable actuación en el derbi sevillano. Debutó ante el Mallorca en Copa y salvo algún balón aéreo apenas tuvo exigencias. Herrera tendrá que decidir por cual de los dos apuesta.

Otra de las novedades en Son Moix fue el lateral zurdo Christian Fernández. El jugador cántabro reaparecía tras lesionarse durante la pretemporada y volvía a vestir de amarillo seis años después de su primera experiencia. Compe- tirá por el puesto con Dani Castellano. El gemelo esta lesionado y Herrera ha cambiado de banda a Ángel López. Sin embargo, Christian se hará pronto con el control del ala izquierda. Tiene opciones de jugar el sábado ante su equipo de formación pero depende de su recuperación física tras el esfuerzo del miércoles. A su favor queda que acabó bien e incluso pidió continuar cuando estaba previsto el cambio. La vuelta de Christian desplazaría el debate de banda para elegir entre los galones e in-teligencia de Ángel y el desplie-gue físico de un David Simón en plena forma.

El riesgo del cambio

Otro reaparición, tras tener que realizar una pretemporada al margen, fue la de Marcelo Silva. El uruguayo demostró buena colocación, contundencia en el corte e inteligencia para doblegar a sus rivales. Quedó patente en el inicio del gol de Guzmán al recuperar un balón en un mano a mano en el que partía con desventaja. Marcelo no dio síntomas de esos problemas que arrastraba en la rodilla por exceso de trabajo muscular en el gimnasio al que fue condenado cuando estuvo apartado de los entrenamientos del Almería. Pero, David García y Aythami se han mostrado como una pareja segura y cambiar cualquier cosa que funciona siempre implica un riesgo.

Por último, aparece el extremeño Guzmán Casaseca como otro de los jugadores que pide a gritos una oportunidad como titular en la Liga. El extremo compite con Nauzet Alemán, un peso pesado del vestuario y un referente de calidad en el equipo, pero Guzmán ofrece cualidades distintas con un juego eléctrico y vertical. Hasta el momento, el de Las Mesas ha actuado de la partida en las tres jornadas de liga, siendo sustituido en dos. Domina el juego entrelíneas y el balón parado. Sin embargo, le aprieta la velocidad endiablada de Guzmán y su facilidad para el desborde, virtudes que exige el planteamiento de Paco Herrera. El técnico tendrá que resolver. Manejar las necesidades deportivas y las claves del vestuario. Pero hay tiempo para todos. La Liga es larga. Además, aún quedan por sumarse figuras como Culio, Valerón, Asdrúbal...