La agonía de un proceso interminable. El transfer de Juan Emmanuel Culio, un culebrón a lo Santa Bárbara que sigue agotando capítulos. El Juez Único de la Comisión del Estatuto del Jugador de la Federación Internacional de Fútbol (FIFA), el inglés Geoff Thompson, recibió el pasado domingo 28 de septiembre las alegaciones del Al Wasl -de la Primera de los Emiratos Árabes y que entorpece la concesión de la licencia al centrocampista argentino de 31 años- y se espera que se pronuncie ahora de forma inmediata. Y lo hará a favor del club isleño. El recurso del club árabe ha frenado la resolución del conflicto, que ahora está únicamente en las manos del máximo organismo internacional.

El 'caso Culio', que tuvo su primer capítulo el 25 de agosto cuando firmaba por la UD, ya solo estaría a la espera del veredicto de la FIFA, que se pronunciará, según fuentes de la entidad amarilla, entre hoy y mañana. De esta manera, y con la licencia provisional -o definitiva en el mejor de los casos-, Culio podría estrenarse este sábado ante el Sporting de Gijón en el Estadio de Gran Canaria (19.00 horas y por las cámaras de la TVC).

El futbolista argentino rompió de manera unilateral su contrato con el Al Wasl y además, una circunstancia que ha complicado su regreso a la categoría de plata del fútbol española, ha denunciado al club árabe [el amarillo ha llegado a manifestar que sufrió "una depresión" por culpa del trato recibido por los responsables del club de Oriente Medio]. El zurdo, un volcán de temperamento y magia, carece de ficha federativa y desde la entidad de Pío XII se aferran al criterio del tribunal de la FIFA para acelerar el final de este culebrón.

El negociador

Toni Cruz, director general deportivo de la UD, viaja esta mañana a Madrid a las oficinas de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) en Las Rozas para agilizar el último suspiro de un proceso laberíntico. La rescisión unilateral por parte del jugador, con una ficha que superaba el millón de euros en el Al Wasl Football Club, y la escasa colaboración del conjunto árabe, así como de la Federación de Fútbol de los Emiratos Árabes, se han convertido en los principales obstáculos. Una pesadilla para la entidad isleña, que ve ahora un rayo de luz. La respuesta jurídica del club árabe es el penúltima capítulo, ya solo falta la firma de la licencia provisional. Cabe reseñar que si Culio hubiese alcanzado un acuerdo para dejar el Al Wasl, o hubiese finalizado su contrato, todo este calvario se hubiese liquidado en un mero trámite administrativo.

Culio, bajo el amparo jurídico de la UD, se ha visto obligado a recurrir al tribunal de la FIFA ante el silencio del Al Wasl. Agotado el plazo, el club árabe ha presentado sus alegaciones para justificar que la rescisión no fue pertinente.

El silencio y la falta de colaboración del Al Wasl se interpreta por parte de la UD como una acción de mala fe. Toni Cruz ya estuvo en Madrid, durante tres jornadas, la semana pasada para dar con una solución. 38 días después de su puesta de largo, Culio,ex del Dépor, ya está en manos de la FIFA. Las trampas del club árabe se han agotado. Abran paso al emperador. Es la joya de la corona de la dirección deportiva. Su integración es plena y luce un físico envidiable. Se acerca el final del calvario.