Golpe de timón. La mano de un estratega bendecido. Paco Herrera realzó el trabajo de sus pupilos en el tramo final del pulso ante el Mallorca. La clave estuvo en la fe ciega en la victoria. "Los goles vienen a continuación, pero podrían haber llegado antes. Hay que reconocer que en la segunda parte con diez o con once -en el Mallorca- las oportunidades fueron muchas y muy claras. Nos faltó acertar. Después tuvimos el mismo tipo de oportunidades que con un equipo que ya estaba en inferioridad".
Cuestionado por los cambios -las entradas de Valerón y Ortuño, así como la de Momo- reconoció que le costó dar el paso. "Tuve que reflexionar para tomar las decisiones y mirar el partido. Precisaba ver lo que estaba pasando. Teníamos el dominio, hacíamos una ocasión de vez en cuando pero nos faltaba algo. Apareció la idea de jugar con tres, meter mucha gente entre líneas y abrir mucho a Nauzet y a Dani para que su defensa de cuatro sufriera entre líneas. Ahí apareció un poco todo. Los jugadores lo interpretaron muy bien".
El olfato del novato
Analizó el tanto de Ortuño, en su estreno como artillero. "No es que justifique el fichaje, pero sí tiene ese tipo de cosas; es lo que pretendíamos. Un jugador fuerte que se quedara los balones, que tuviera cierta agilidad. Es lo que pretendemos con él. Nos puede dar muchas alternativas tanto si sale de principio como en el segundo acto", resaltó.
Y reconoció carencias en la primera parte. "Al inicio jugamos muy tensionados, no sé por qué. Muy acelerados, muy nerviosos, quisimos hacer cosas que no son nuestras. La precipitación estuvo en dar pases de riesgo cuando no era preciso (...) A la contra, nos hicieron daño porque con el equipo abierto perdíamos la pelota. Eran errores no forzados. Esas situaciones nos hicieron daño y que cambiáramos a dos medios centros fijos. La clave estuvo ahí", determinó el técnico.
Al triunfo le da un valor "fantástico" y desveló que había "jugadores eran sobreexcitados porque querían demostrar y hacer las cosas con urgencia y sin velocidad". Sobre Roque en el lateral derecho, valoró que Roque ha tenido una situación que "le ha marcado la situación del gol. Era el único miedo que tenía, la situaciones interiores en defensa". Y confirmó que a Viera le hacen falta "esas arrancadas que hacía. Ese darlo todo requiere de un esfuerzo físico y está en el proceso. Pero estoy muy satisfecho con su trabajo y aportación".
