El Valencia encarriló la victoria ante el Espanyol en el Power8 Stadium con el 0-2 tras una falta directa, que rebotó en el portero Pau López, aunque no evitó los nervios y el sufrimiento después de que Sergio García acercara a los locales en el minuto 89 (1-2).

Los de Nuno se resarcieron de su derrota ante el Málaga y se tomaron la revancha de la eliminación en octavos de la Copa. El planteamiento del portugués fue más prudente esta vez. Los catalanes, por su parte, no brillaron como lo hicieron durante el pasado mes de enero. Eso sí, al final recuperaron la garra y las opciones de empatar.

El primer tanto de Piatti a media hora para el final llegó después de que el argentino rozara con la punta de una bota un centro muy escorado de Gayà.