El juez Fermín Otamendi, titular del juzgado de Instrucción número 2 de Pamplona, tomó declaración a lo largo de la jornada de ayer a los expresidentes de Osasuna Pachi Izco y Miguel Archanco, al exvicepresidente Juan Pascual, al exgerente Ángel Vizcay, al exdirectivo Txuma Peralta y a Diego Maquirriain, presidente de la Fundación Osasuna. Todos ellos declararon en calidad de imputados por el desvío irregular de fondos del club, la comisión de los presuntos delitos de apropiación indebida, societario y falsedad documental, y por intentar amañar varios partidos en las dos últimas temporadas.
Es el nuevo escándalo, financiero y deportivo, que golpea al fútbol español. Archanco, Vizcay y Peralta habían sido detenidos el jueves en la capital navarra por efectivos de la Policía Nacional y pasaron la noche en los calabozos de comisaría a la espera de prestar declaración, en tanto Izco, Pascual y Maquírriain eran detenidos también en Pamplona en la mañana de ayer.
Las declaraciones comenzaron a las 13.45 horas y finalizaron sobre las once de la noche con la última deposición, la del expresidente Miguel Archanco. El anterior en declarar había sido su predecesor en el cargo, Patxi Izco. El juez ha permitido la presencia en las tomas de declaración de los abogados de todas las partes personadas en la causa, por lo que además de los letrados de los seis imputados han estado presentes también los del Club Atlético Osasuna, que ayer mismo se personaba como acusación particular, y de la Liga de Fútbol Profesional además de la fiscal de guardia. La Liga fue la primera en presentar querella por el ya conocido como "caso Osasuna" tras la confesión el pasado diciembre del exgerente Ángel Vizcay.
Los seis imputados permenecieron en dependencias del Palacio de Justicia de Pamplona a la espera de una decisión del juez Otamendi, que a medianoche decidía dejar en libertad con cargos a Pachi Izco, Ángel Vizcay, Juan Pascual y Diego Maquírriain. Al abandonar la sede judicial ninguno de ellos quiso realizar declaraciones.
Archanco y Peralta, por su parte, eran trasladados de nuevo a la comisaría de la Policía nacional, donde pasarán de nuevo la noche a la espera de que el magistrado comunique en la mañana de hoy su situación procesal. El abogado de la Liga de Fútbol Profesional ha pedido el ingreso de ambos en prisión.
El proceso judicial comenzó el 19 de febrero, cuando la actual junta directiva de Osasuna, presidida por Luis Sabalza desde el 10 de diciembre, denunció presuntas irregularidades cometidas supuestamente durante el mandado de Archanco.
El club denunció el desvío irregular de fondos de 2,4 millones de euros, una cantidad que el juez elevó hasta los 3,7 millones. El informe de la auditoría revela supuestas irregularidades en las cuentas del club, sin que necesariamente estén ligadas todas ellas a la confesión del ex gerente, Ángel Vizcay, del intento de amaño de partidos en las dos últimas temporadas.
En el mismo juzgado se ha sumado a este sumario la querella que la Liga de Fútbol Profesional (LFP) presentó en los pasados días por un supuesto amaño de partidos, lo que implicaría la comisión de los presuntos delitos de apropiación indebida y corrupción de particulares, además del de fraude deportivo.
El Código Penal recoge el delito de fraude deportivo en su artículo 286 bis.4, que castiga con penas de cárcel de seis meses a cuatro años e inhabilitaciones de uno a seis años "a los directivos, administradores, empleados o colaboradores de una entidad deportiva, cualquiera que sea la forma jurídica de ésta, así como a los deportistas, árbitros o jueces, respecto de aquellas conductas que tengan por finalidad predeterminar o alterar de manera deliberada y fraudulenta el resultado de una prueba, encuentro o competición deportiva profesional".
Por fraude deportivo Anticorrupción ya ha presentado 42 querellas por el partido Levante-Zaragoza correspondiente a la última jornada de la temporada 2010-2011. El Zaragoza ganó 1-2 y logró la permanencia en Primera, siendo el Deportivo de La Coruña quien bajó a Segunda.
