El Barcelona de Luis Enrique recibirá en quince días al Real Madrid de Ancelotti en el Camp Nou. Será el gran choque de la Liga, un partido que se ha ganado la especial denominación de "clásico". Con motivo: los duelos Madrid-Barça se vienen repitiendo sin falta desde la primera Liga (1928-29), como los de ambos ante el Athletic, el tercer equipo que junto a merengues y culés siempre ha estado en Primera.
Pero al nivel de clásico por tradicional, reiterado y repetido, también hay que elevar los duelos al gol entre el madridista Cristiano Ronaldo y el barcelonista Leo Messi, los pichichis de nuestra Liga en las cinco últimas temporadas y, por extensión, máximos realizadores y Bota de Oro de los torneos europeos. Ambos empatados a 30 goles tras 26 jornadas disputadas después de que el portugués saliera el sábado de vació de San Mamés y de que el barcelonista se llevara a casa el balón con el que ayer le hacía un triplete al Rayo, el quinto de la temporada y con el que establecía un nuevo y doble récord en nuestro fútbol: el número 32 de su carrera, rompiendo el empate que mantenía hasta el momento con Telmo Zarra (Athletic), y el 24 en Liga, uno más que los logrados por Cristiano Ronaldo.
Empatados a 30 goles tras la reacción de Messi en lo que llevamos de segunda vuelta y el parón sufrido por Cristiano tras haber logrado unos números excepcionales en la primera. Como las diez jornadas consecutivas en las que no faltó a su cita con el gol, de la tercera a la duodécima, o los 28 goles que atesoraba en el ecuador del campeonato. Números que llevaron al madridista a acumular una máxima renta de 12 goles frente a Messi en la jornada 15, cuando él llevaba 25 por los 13 del argentino.
Pero a Cristiano empezaron a fallarle las fuerzas tras recibir su tercer Balón de Oro y con el inicio de la segunda vuelta. De una media de 1,5 goles por partido en las 19 primeras jornadas del campeones, el delantero del Real Madrid ha caído hasta el 0,28 de media en la segunda, en la que únicamente ha sumado dos goles en siete encuentros: uno al Elche y otro, de penalti, al Villarreal. En cinco partidos se quedó sin marcar, contando lógicamente los dos encuentros de la sanción por su expulsión en Córdoba.
La sonrisa en esta segunda vuelta lleva el nombre de Messi, que le ha remontado nueve tantos a CR en estas siete últimas jornadas. El barcelonista ha pasado de una media de un gol por encuentro en la primera vuelta (19 en 19) a 1,57 en la segunda (11 en 7), en la que sólo se quedó sin marcar en la derrota de los de Luis Enrique ante el Málaga (0-1).
Con Barcelona y Real Madrid separados por un puntos y Cristiano y Messi empatados a goles el clásico de dentro de dos semanas se presenta superlativo. Una vez más.
