Un vestuario abatido. El fin de la aventura fue trágico para el filial. Mingo Oramas, técnico de Las Palmas Atlético, pedía perdón a la afición por no lograr la salvación y no se manifestaba sobre su continuidad en el cargo. "La primera parte estuvo equilibrada, en la segunda presentamos más cosas, con situaciones de gol claras pero en un error nos empatan sin tiempo para revertir la situación (...) Valorar las cosas carece de sentido, ellos han conseguido lo que querían y nosotros no. Sólo queda felicitarles y levantar el ánimo por nuestra parte".
"Hemos nadado muchísimo y nos hemos quedado en la orilla, nos vamos a Tercera sin perder los últimos siete partidos. Estoy muy orgulloso de mis jugadores; lo dije al inicio y ahora también. En un futuro los veremos en el fútbol profesional. Es una lástima que no hayamos podido mantener la categoría; pero el fútbol es así".
En relación a la batalla psicológica, reconoce que pudieron estar más listos tras el 1-1. "Ellos fueron superiores a partir del gol, querían que el tiempo pasara y son sus armas, con ellas intentaron solventar la eliminatoria y les ha salido bien. Hicieron su fútbol y no tengo nada que objetar, nos vamos a Tercera División sin perder", reiteró.
Insiste que la máxima prioridad pasa por recuperar al grupo, su futuro en el banquillo del filial carece de relevancia. "No estoy como para pensar en mi futuro con el presente que tengo por delante en el vestuario. Lo que tengo que hacer es levantar el ánimo de los futbolistas para que esto les sirva de experiencia. Me disculpo por no lograr el cometido por el que vine, sí me siento decepcionado. Creí que este equipo estaba capacitado para salvar la categoría y finalmente no pudo ser".
