Rafa Benítez, que será presentado hoy como nuevo entrenador del Madrid, lleva dos días trabajando a destajo en la ciudad deportiva de Valdebebas, desde que aterrizó en la capital de España el lunes tras acabar su vinculación con el Nápoles, y entre las dos jornadas ha mantenido numerosas reuniones antes de encarar hoy un día soñado en su carrera, su presentación en el Bernabéu.

Benítez ha devorado las horas trabajando encerrado en la ciudad deportiva de Valdebebas, donde durmió tras quedar impresionado por unas instalaciones que no conocía, según informaron a Efe fuentes del club.

En su anterior etapa en el club, la primera plantilla aún se entrenaba en la vieja ciudad deportiva de la Castellana y tanto él como sus ayudantes están sorprendidos favorablemente por las instalaciones de la Ciudad Deportiva, los campos de entrenamiento y la residencia.

Ayer, en su segundo día de trabajo mantuvo importantes reuniones. Se vio con José Ángel Sánchez, director general; Emilio Butragueño, director de relaciones institucionales; y analizó el estado de la cantera con Zinedine Zidane, técnico del Castilla.

Benítez ya ha conocido al personal de prensa del club que trabaja a diario en Valdebebas, se ha visto con el delegado del primer equipo Miguel Porlán Chendo, y ha tenido una charla con el cuerpo médico y los fisioterapeutas del Madrid.

También ayer Benítez hizo pública una carta de despedida del Nápoles en la que, agradecido por su experiencia en Italia, asegura que ha "pasado dos años inolvidables".

Ayer por la noche tenían previsto llegar a Madrid la mujer de Benítez y sus hijas junto a más familiares, que acudirán a la puesta de largo del nuevo técnico en el palco de honor del estadio Santiago Bernabéu.