Los Golden State Warriors, a pesar de los 44 puntos de LeBron James, prevalecieron en el primer choque de la Final de la NBA gracias al desplome absoluto que sufrieron los Cavs de Cleveland en la prórroga (108-100), donde sólo anotaron dos puntos. De poco sirvió que James registrara su récord de anotación en unas finales, ya que el alero llegó agotado al tiempo extra por la intensa defensa de Iguodala, Barnes o Green. En la imagen, Curry (Warriors) anota ante Dellavedova.