El duelo de tenistas suizos en las semifinales del Abierto de Estados unidos cayó del lado del veterano Roger Federer, el número dos del mundo, que venció por 6-4, 6-3 y 6-1 a Stan Wawrinka, quinto cabeza de serie, y jugará la gran final ante el serbio Novak Djokovic, primer favorito.

El duelo entre ambos será el cuadragésimo segundo, con ventaja de Federer por 21-20 después que le ganó en la final del pasado Masters de Cincinnati por 7-6 (7-1) y 6-3, para confirmar que en la pista dura de Flushing Meadows estarán los dos mejores jugadores del momento.

Federer y Djokovic, que había vencido en la primera semifinal al croata Marin Cilic por 6-0, 6-1 y 6-2, se han enfrentado en tres finales de torneos de Grand Slam, dos en Wimbledon, que ganó el tenista serbio (2014 y 2015), y una en el Abierto de Estados Unidos, en la del 2007, que cayó del lado del jugador suizo.

"Será un duelo complicado, difícil, Novak (Djokovic) está en un gran momento, ha tenido un año excepcional y será un gran reto", destacó Federer al concluir el partido. "Nos conocemos muy bien, este año nos hemos enfrentado ya cinco veces, pero estaré listo para luchar por el título".

Ante Wawrinka, Federer, de 34 años, que jugará por primera vez la final del Abierto desde el 2009, cuando rompió racha de cinco títulos de campeón consecutivos, volvió a imponer su tenis completo y de precisión con el que nunca permitió que su discípulo se pudiese meter nunca en el partido.

El partido, que duró una hora y 32 minutos, sólo tuvo algo de interés e historia en la primera manga, cuando Wawrinka, actual campeón de Roland Garros, se mantuvo en el juego, a pesar que en el tercero, Federer ya le había roto el saque.

Federer, intratable con su saque, siguió sin perderlo, también resto de forma brillante, su golpe de derecha siguió demoledor, lo mismo que su revés de una mano que superaba en todo momento los intentos de Wawrinka de hacer un tenis más agresivo con subidas a la red.

La manga cayó del lado de Federer y a partir de ese momento todo le fue más fácil porque Wawrinka seguía sin descifrar los saques del actual número dos del mundo, que siguió inaccesible y esperó al séptimo juego para hacerle de nuevo el break a su rival.

Con el 4-3 a su favor la moral de Wawrinka se vino abajo y los volvió a perder en el noveno para que Federer cerrase la manga a su favor con toda la comodidad.

Luego llegaría la tercera en la que fue todo un paseo para Federer que vio como Wawrinka ya ni tenía juego, ni ganas de luchar por una remontada que se presentaba imposible ante la inspiración y juego del exnúmero del mundo, que se dedicó a dar una cátedra de tenis con sus golpes mientras aseguraba la victoria, que cerró con un aces monumental, el décimo del partido.

Federer, que mantuvo su dominio en los duelos ante Wawrinka al que ganó por decimoséptima vez en 20 enfrentamientos, concluyó el partido con 29 golpes ganadores y sólo 17 errores no forzados, por 25 y 30, respectivamente, de su rival, que perdió cinco veces el saque y ganó nueve puntos en 18 subidas a la red.

Federer también lo superó en esa faceta del juego al conseguir 22 tantos de 28 subidas, lo que demostró el tenis de ataque permanente que mantuvo desde que salió a la pista central Arthur Ashe Stadium.

" Volver a la final del Abierto después de seis años ha sido el resultado de un trabajo duro, pero estoy muy feliz de haberlo conseguido", declaró Federer, que llega a la final sin haber perdido un sólo set y tiene 28 ganados de forma consecutiva. "Demuestra que estoy en un gran momento de forma con un tenis completo".

Federer dejó su marca en 267-13 en los partidos de Grand Slam en los que ganó la primera manga.

La duodécima jornada del Abierto también dejó los triunfos de las italianas Roberta Vinci, la número 43 del mundo, y Flavia Pennetta, la 26, que dieron las sorpresas en las semifinales femeninas al vencer y eliminar a la estadounidense Serena Williams, la gran favorita y primera cabeza de serie, y a la rumana Simona Halep, segunda, respectivamente.

Vinci, de 32 años, ganó 2-6, 6-4 y 6-4 a Serena, que se quedó a dos triunfos de haber logrado el ciclo completo en la misma temporada dentro de los torneos de Grand Slam después que había ganado el Abierto de Australia, Roland Garros y Wimbledon.

Mientras que Pennetta se impuso por 6-1 y 6-3 a Halep y al igual que su compatriota jugarán por primera vez una final femenina en el Abierto de Estados Unidos y también en un torneo de Grand Slam.

También harán historia para el tenis femenino italiano al ser la primera vez que habrá dos jugadoras del país transalpinas que disputen una final de Grand Slam y de un Abierto de Estados Unidos.