El Barcelona disputó su primer partido de pretemporada logrando una cómoda victoria ante un flojo Celtic de Glasgow, al que dejó sin ninguna opción ya en el primer tiempo, en el que quedó fijado el marcador final (1-3). Messi jugó los primeros 45 minutos y con el argentino en el campo el Barça volvió a disfrutar de sus mejores momentos de fútbol.

Fue una primera parte cómoda para un Barcelona que dominó a placer y sólo se complicó la vida cuando los dos centrales (Martínez y Mathieu) evidenciaron falta de temple con el balón en los pies.

Una acción fácil en la que el meta catalán envió el balón al central terminó con un fallo de éste en el control que aprovechó Griffiths a la media hora para empatar el partido (1-1), después de que Arda Turan adelantase a los azulgrana con un gran remate a la escuadra tras pase de Aleix Vidal.

Con el empate, el Barcelona volvió a hacerse con el partido y no tardó en adelantarse en el marcador, ya que un minuto después el Celtic devolvió el favor a los de Luis Enrique y en un centro de Cámara desde la izquierda el central Ambrose desviaba al fondo de su portería.

El tercer tanto azulgrana llegó tras una gran combinación de equipo, que arrancó con un cambio de juego de Messi, siguió con un pase en profundidad de Cámara a Luis Suárez y un centro casi desde la línea de fondo del uruguayo a Munir, que entró por el centro y sólo tuvo que empujar el esférico dentro de la meta.

A pesar de que el dominio no fue tan perseverante, el Barcelona no tuvo ningún problema en el campo en la segunda mitad y disfrutó de un par de claras oportunidades para ampliar el marcador. La primera en el minuto 56, cuando Denis Suárez recortó bien y el meta del equipo escocés debió echarse al suelo para atajar el balón.

Más fácil pareció una ocasión de Luis Suárez, antes de ser sustituido, cuando se encontró con un balón franco dentro del área, pero optó por disparar con la zurda y el esférico salió muy desviado.

Pese a estar mucho más rodado, pues lleva ya disputadas dos rondas previas de la Liga de campeones, la única oportunidad del conjunto escocés en todo el segundo acto la desbarató un seguro Masip, que poco después entró en la ronda de cambios de la que sólo se salvó el lateral Aleix Vidal, quien acabó con el brazalete de capitán.

El Barcelona regresará a la Ciudad Condal para prácticamente de seguido viajar a Estocolmo, donde el miércoles se enfrentará al campeón de la Premier, el Leicester City de Ranieri. Un Barça que aún espera a sus nuevas caras -los franceses Umtiti y Digne y el portugués André Gomes-, y a los internacionales que jugaron la Eurocopa.