El Gran Canaria FS calienta motoros de cara a su regreso a la Primera División, que será el próximo miércoles (12.00 horas) en un estreno de altos vuelos frente al Inter Movistar, el equipo en el que juega Ricardinho, el mejor del mundo. Saúl Jiménez y Pablo Salado, dos de los jugadores del equipo amarillo que lograron el ascenso a la máxima categoría, participaron ayer en un chat con los lectores de la web de LA PROVINCIA. Y los dos se mostraron optimistas con respecto al debut y a la temporada.

"Tenemos buenísimas sensaciones, pero debemos mantener los pies en la tierra y saber que nuestro objetivo este año es la permanencia", explican. Por eso se muestran ilusionados con respecto al choque del miércoles: "Siempre es una motivación extra comenzar frente al Inter. A pesar de que no sea un rival de nuestra liga saldremos a ganar y dar una buena imagen", comentan ante las preguntas de los lectores. Los dos coinciden en que se medirán al que "en este momento es el mejor jugador del mundo", en referencia a Ricardinho. "Habrá que intentar frenarlo de todas las formas posible. Seguro que nos hará correr mucho", añaden.

Saúl Jiménez y Pablo Salado consideran que una de las fortalezas del equipo es el vestuario: "El ambiente es inmejorable. Creemos que es nuestra principal virtud. Somos una piña", comentan. Acerca de otros aspectos positivos de cara a esta temporada, indican que "somos un equipo que en ataque tenemos mucho desparpajo y contamos con el factor sorpresa por ser un equipo recién ascendido". "En lo que se refiere a las debilidades, pues el hecho de no tener experiencia en la categoría. Esperemos que con el paso de las jornadas no suponga un problema", continúan ambos sobre los puntos fuertes y débiles del Gran Canaria.

También se pronunciaron sobre los movimientos del verano en el equipo, en el que han causado baja Rivero, Martín o Suárez y han llegado Cámara, Pichí o Montero. "Son bajas importantes pero confiamos muchísimo en las nuevas incorporaciones y creemos que hay una gran plantilla para lograr la permanencia", declaran.

Para ese objetivo consideran que sus rivales estarán entre el Cartagena "por ser un recién ascendido y a priori otros equipos comos Jumilla, Zaragoza y Levante".

El equipo termina hoy su pretemporada con un partido frente al Profiltek Agüimes, un verano en el que no han salido de la Isla para cuidar la caja fuerte: "Nos hubiera gustado medirnos a rivales de Primera pero por el problema de no poder desplazarnos a la Península no ha sido la esperada. Pero confíamos en el buen trabajo realizado durante estos dos meses y nos encontramos preparados para debutar", comentan.

Pablo Salado fue un fichaje del curso pasado que dio un gran rendimiento: "He tenido alguna oferta pero desde que ascendimos pensé que mi prioridad era jugar con este equipo en Primera. Me siento como en casa", indica el gaditano. Mientras, el galdense Saúl no necesita ese "como" ya que está en su casa: "Sí echo de menos jugar en Gáldar, pero las circunstancias mandan y la situación económica ha hecho que el equipo se haya tenido que trasladar a Las Palmas. Aquí también estamos muy a gusto", sentencia.