Uno de los equipos que estuvo en la fundación de la Liga Nacional de Fútbol Sala, el organismo que desde 1989 aúna en torno a una misma competición a los clubes profesionales de este deporte en España, volvía a retomar su sitio entre los grandes. Bajo su denominación actual, Gran Canaria FS, este representativo histórico de la modalidad en el Archipiélago celebra actualmente sus treinta años de vida paseando el nombre de la Isla por la máxima categoría.
El conjunto grancanario, que firmaba una fase de ascenso prodigiosa tras una temporada regular discreta en Segunda, escribía otro exitoso capítulo en su trayectoria a mediados del año 2016. En Segovia, una de las cunas de esta especialidad a nivel español, los amarillos se imponían al cuadro local en la eliminatoria final del Playoff de ascenso.
En el segundo de los encuentros de la serie -al mejor de tres-, y después de imponerse por un rotundo 7-1 en el Centro Insular de Deportes en el choque inaugural, los de Suso Méndez, entrenador y alma máter de la entidad, vencieron por un ajustado marcador de 3-4 en un duelo que tuvo un desenlace emocionantísimo.
El goleador Juanillo se erigió en gran protagonista. El galdense forzaba la prórroga a falta de tres minutos para la finalización tiempo reglamentario, y en la prórroga hacía un doblete que colocaba a los amarillos otra vez en Primera, donde están cuajando una decorosa temporada en la que el objetivo marcado es obtener la permanencia.
