El Herbalife Gran Canaria se concentra de cara al partido ante el Valencia Basket, equipo ante el que ha caído en los dos choques ligueros y ante el que ahora buscan la revancha. Su entrenador, Luis Casimiro, pasó en el día de ayer por los micrófonos y señaló: "A nivel mental estamos bien, con muchas ganas. Nos ha costado mucho llegar hasta aquí y ahora vamos a intentar disfrutar de la experiencia. Seguimos con la incógnita de los jugadores tocados, sobre todo de Rabaseda. Ésta ha sido una semana de entrenamiento atípica, en la que no hemos podido contar con todos".

El foco de la polémica de esta previa ha estado en sus declaraciones acerca de los jugadores lesionados, que han sido interpretradas como un farol por parte de Pedro Martínez. "La realidad es que el lunes cuatro jugadores entrenaron al margen y mañana no todos estarán sanos. Pero cada uno puede darle la interpretación que quiera a mis declaraciones. Nunca voy de farol y no nos hemos puesto la piel de cordero. Es una realidad que ha sido una semana muy complicada en los entrenamientos", aseguró.

Pese a que son muchos los jugadores que se encuentran entre algodones, su entrenador ha dejado claro que "harán un esfuerzo extra y darán el máximo de ellos, aunque no estén al 100%". Una de las grandes dudas es Xavi Rabaseda, quien trabaja al margen con los fisioterapeutas con el objetivo de poder llegar a una cita histórica".

Pese a que los antecedentes no son favorables a los jugadores amarillos, Luis Casimiro espera que "a la tercera sea la vencida. El Valencia nos tiene la medida tomada. Ellos juegan muy bien y están haciendo una gran campaña. Debemos hacer un buen trabajo a nivel general. La clave será evitar las canastas fáciles, sin fruto de errores de comunicación", señaló. Un trabajo serio basado en una buena defensa, como la de la pasada semana ante el Iberostar.

"Podemos competir hasta el final si hacemos un buen trabajo", sentenció Casimiro, en la previa de un partido en el que el Granca puede continuar haciendo historia.