Alberto Salazar, entrenador del atleta británico Mo Farah, abusó de fármacos recetados y utilizó sustancias prohibidas para mejorar los niveles de testosterona y el rendimiento de sus corredores en Oregon (EE.UU.), según revela un documento oficial del que informó el dominical The Sunday Times. Los documentos, a los que ese dominical dice haber tenido acceso, muestran que Farah y otros atletas entrenados por Salazar consumieron un suplemento basado en la sustancia L-carnitina. Un atleta al que se le suministró una dosis alta concluyó que era tan efectiva como el dopaje sanguíneo, indica el informe.