El chino Haotong Li ha hecho historia y ayer dio el salto definitivo a la élite pura y dura del golf mundial, donde ya venía campando en los últimos tiempos, sobre todo desde que acabara en tercer lugar en el pasado British Open de Royal Birkdale. Y lo hizo tras imponerse en un emocionante mano a mano a Rory McIlroy en la jornada final del Dubai Desert Classic.

Un torneo éste -donde Sergio García ganaba el año pasado- en el que la actuación de la Armada española hay que valorarla positivamente y, sobre todo, puntuar con buena nota el sexto puesto final obtenido por el grancanario Rafa Cabrera Bello (-16), que lograba con dos birdies finales en los hoyos 17 y 18.

Así mismo es de destacar el top-20 de Miguel Ángel Jiménez (-15) y el top-25 de Alejandro Cañizares (-14) y Adrián Otaegui (-14). Sergio García (-12), por su parte, finalizaba en el puesto 32º, realmente frustrado ante la cantidad ingente de opciones de birdie que dejaba escapar durante el fin de semana.

En la actuación de Rafa, que ha sido magnífica en los últimos, quizá haya influido demasiado el +2 con el que finalizó el primer día, en el que la gran mayoría hizo unos muy buenos recorridos, con infinidad de birdies.