Para vencer lejos de casa debes hacerlo por k.o. Ni siquiera tirando al rival una vez por asalto tienes seguro que te den vencedor a los puntos. Estas afirmaciones son viejas en el mundo del boxeo, y algo de eso le pasó anoche a Aramis Torres en la localidad italiana de Florencia. Los jueces de su combate por el título europeo de la EBU del peso mosca le dieron perdedor por puntos frente al ítalo-marroquí Mohammed Obbadi.

El de Parque Central fue de menos a más a lo largo de los doce asaltos a los que estaba programado el combate y que llegaron a su término con resultado final poco favorable para los intereses del grancanario, que ve subir la primera derrota a su casillero desde que accediera al campo rentado. Una derrota que se antoja, a todas luces, inmerecida.

En la primera parte del combate, Obbadi se mostró algo más combativo y se encontró además, a los pocos segundos de iniciado el primer asalto, con un primer regalo del árbitro, que realizó una cuenta de protección a Aramis, después de que se resbalase sobre el ring y saliese trastabillado más por ese resbalón que por el posible contacto de la llegada de un golpe del rival ítalo-marroquí.

Los siguientes asaltos prosiguieron con intercambios de golpes y con Aramis Torres rehaciéndose poco a poco y equilibrando las acciones del púgil local, quien ya ostentara este título que ayer volvía a disputar.

Sin embargo, a partir del séptimo asalto, el combate no tuvo otro color que el del negro del calzón que portaba el púgil grancanario. El del Peraboxing se deshizo poco a poco del dominio de Obbadi, que salió con mucho ímpetu a este séptimo round e incluso el pupilo de Yeray García El Pera fue capaz de conectar un par de golpes claros al rostro del rival.

Ya a partir del octavo, el curso del combate tuvo otro cantar. Al menos a nuestro juicio, pues Aramis conectó entonces los mejores golpes, llevó siempre la iniciativa y hasta tuvo incluso en varias ocasiones contra las cuerdas a Mohammed Obbadi.

Además, cabe reseñar que el árbitro principal del combate fue en exceso permisivo con varios golpes de conejo que lanzó Obbadi a la nuca y la espalda de Aramis. Golpes ilegales que deben ser sancionados y que el árbitro no hizo. Además, también permitió al ítalo-marroquí un golpe bajo sobre Aramis en el décimo asalto. Golpe que vio perfectamente, porque paró la pelea y solicitó que se parara el cronómetro para atender al grancanario, quien finalmente no necesitó asistencia y prosiguió el combate.

Para más inri, el árbitro principal tampoco fue capaz de detener el combate cuando Aramis Torres tenía claramente contra las cuerdas a Mohammed Obbadi, en los asaltos noveno, undécimo y duodécimo y, al menos, debió recibir una cuenta de protección.

Todo ello hubiese igualado un poco más las desfavorables cartulinas de los jueces, pero no fue así y, casi como cabía esperar, a pesar de demostrar que acudió en busca de cumplir su sueño muy bien preparado, Aramis Torres se vuelve a Gran Canaria sin el tan deseado cinturón.

Poco se esperaban el veredicto final los seguidores del grancanario y el propio púgil, sobre todo después del gran y excelente trabajo realizado tanto antes como durante el combate, por lo que se debieron sentir ganadores.

Ahora sólo cabe esperar que la promotora de Aramis Torres, Promotion Boxing Kas, vuelva a intentar buscarle una nueva opción de acceder al título europeo de la EBU, bien solicitando un combate de revancha frente al propio Mohammed Obbadi o que sea la EBU quien le vuelva a nombrar aspirante oficial.

Aramis Torres y Yeray García El Pera regresarán a Gran Canaria y deberán hacerlo con la cabeza bien alta, porque uno sobre el ring y el otro a pie de cuadrilátero hicieron todo lo posible por traerse a la Isla el cinturón en litigio. A buen seguro que, de seguir en esta línea, el bravo boxeador del Peraboxing dará muchas satisfacciones en un futuro no muy lejano.