¿Está usted disfrutando de su mejor momento deportivo?
Sí. Este título ha tenido una repercusión que nos ha sorprendido y que no esperábamos.
Suponemos que ganar el Europeo femenino no ha sido fácil.
Aunque no ha habido mucha competencia, en la inglesa Catie Munnings he tenido a una rival bastante, porque ha corrido mucho. Todo el año hemos estado ganando una u otra. Esto ha hecho más interesante y bonita la lucha por el título. Ella logró más puntos en la general de la categoría ERC3 que en 2017, y eso es significativo de que ha sido más competitiva.
Quinta absoluta del Europeo en la categoría ERC3, un resultado también importante.
Durante gran parte del campeonato llegamos a ir terceros y luego cuartos. Pero con el abandono en el Rally Barum nos dejamos unos puntos valiosos y perdimos muchas opciones. En el último rally, en Letonia, acudimos con la idea de acabar sí o sí para poder centramos en el trofeo Ladies Trophy con la finalidad de asegurar el resultado y el título. El objetivo a principios de temporada era acabar en el top 5 del ERC3 y ganar el Ladies. Hemos conseguido ambas cosas.
¿Resúmanos su experiencia en el Europeo?
Es un certamen bonito, diferentes culturas, gastronomías, paisajes, tramos, organizadores, idiomas, gentes y aficionados; nunca sabes lo que te vas a encontrar? Ha sido un sueño competir en el Europeo. Cada prueba es diferente. En el ERC hay un buen ambiente, tanto que me ha cautivado para intentar volver a repetir el próximo año. Es un calendario en el que los organizadores siempre están innovando para sorprendernos. Ha sido un año mágico.
Este título de Ladies Trophy cobra todavía mayor valor al ser un campeonato mixto, con tierra y asfalto.
Es un campeonato muy completo para el piloto. Exige experiencia en la conducción en tierra y asfalto. Estuvimos a un buen nivel en asfalto, sin embargo en la tierra nos dimos cuenta de que nos falta un punto más de competitividad para ir más rápidos.
Este título no ha venido solo, detrás hay años de trabajo.
Así es. Estar mucho tiempo fuera de casa implica varios días por ahí, horas de avión, coches, hoteles? Salir fuera es complicado; además la logística es prioritaria y en ella tiene mucho que ver la labor del copiloto. Todo lo que has hecho con anterioridad te sirve de algo. El Nacional te aporta mucha experiencia, al igual que los tests privados que ayudan para dar el salto al Europeo. Sin embargo, pronto nos dimos cuenta de que en la tierra necesitábamos mejorar nuestro nivel, pero los presupuestos ya no permitían ampliar rallys en tierra en España. El hecho de que la Federación Española tenga previsto un campeonato mixto en 2019 será de mucha ayuda para los pilotos que quieran proyectarse fuera, como a los pilotos de la beca promocional que organiza la propia Federación, cuyo premio es participar en el ERC.
¿Es usted una atrevida o su valor es acumular experiencia?
No me gusta definirme, pero me aprieto el cinturón lo más fuerte que puedo, tanto que llego a casa con marcas en la clavícula. No cabe duda de que el automovilismo es un deporte de riesgo, pero también soy consciente de que hay muchas medidas de seguridad. Este año cuento con un asiento hecho a medida que palía en gran parte las molestias de la lesión cervical, lesión que volvió a reaparecer en el Rally de Azores. No me considero atrevida, pero sí decidida.
¿El hecho de ser mujer conlleva más exigencia o es una cuestión de cualidades?
Es cuestión de cualidades. No creo que haya diferencias entre los hombres y las mujeres. Es cierto que cuando lo hacemos bien tenemos más eco, pero también cuando nos equivocamos la repercusión es mayor. El motivo es que somos pocas y eso se tiene más en cuenta. No creo que nos traten diferente. Tanto Catie como yo nos hemos encontrado muy cómodas en el Europeo y contentas con el trato que hemos recibido.
Usted es un referente femenino a nivel insular, nacional y ahora europeo. Además tiene seguidoras locales como Luzmi Santana...
Cada vez hay más mujeres que se incorporan al automovilismo, no sólo como pilotos o copilotos, sino también como federativas, comisarias de pruebas y técnicas. La presencia de la mujer es cada vez mayor. Intento ser un buen referente para Luzmi. No solo como persona, sino también como deportista. Por eso intento guiarla por el camino correcto, pero siempre teniendo como prioridad los estudios. Es una buena niña y está muy centrada, tiene las cosas claras; creo que llegara lejos en este deporte.
Detrás de todos los éxitos siempre hay alguien en la sombra. ¿Quién es esa persona en el caso de Emma Falcón?
Mi padre. A él no le gusta mucho salir en la foto, pero siempre ha estado a mi lado desde mi etapa en el karting. Aunque tiene muchas ocupaciones profesionales, es capaz de estar en la mayoría de los rallys, incluso los que se disputan muy lejos como Grecia o Chipre. Siempre busca un hueco para apoyarme.
¿Cuántas veces le han dicho que deje los rallys?
Mi abuela me lo recuerda constantemente. De diez veces que la veo, en ocho siempre me repite que deje el automovilismo.
¿Cuál ha sido su momento más feliz en lo deportivo?
Hay muchos. El más reciente fue acabar el Rally de Liepaja (Letonia) y ganar el trofeo Ladies Trophy. Fue muy especial. Los tramos eran duros, nunca acababan. La prueba se me hizo eterna y a ello había que sumar que no se podían cometer errores. Al final recibí felicitaciones de los directivos de Eurosport Events, de los organizadores del ERC, de otros pilotos, de la familia de Catie Munnings, de mi familia y de todo mi equipo. Viví un momento muy emocionante que dejaba atrás un alto nivel estrés acumulado por la fuerte presión que sufrimos en competición.
¿Y el peor momento?
El último fue en el Rally Barum de este año al abandonar por accidente. Pensé que había tirado por la borda el campeonato. También cuando sufrí un accidente en el Campeonato de España por el tuve que parar durante un año por decisión médica, para centrarme en la rehabilitación.
¿Cuál es el objetivo para la próxima temporada?
Mi intención, si logró reunir el presupuesto necesario, es subirme a un R5 y correr el Campeonato de España de Rallys de asfalto y algunas pruebas en Canarias. Pretendo compaginarlo con citas esporádicas del Europeo con un vehículo de la categoría R2 o R3. Lo he pasado tan bien en el certamen continental que quiero repetir.
¿Ha tenido la oportunidad de pilotar un vehículo R5 a modo de test?
Sí. Lo hice en el circuito de Castellolí, en Barcelona, asesorada por David Bosch, todo un crack. Me encontré muy cómoda, me gustó. Es una maravilla de coche, increíble en cuanto a comportamiento dinámico. Ojalá pueda repetir la experiencia. Bien es cierto que no es lo mismo conducir en circuito que en tramos de rally, que resultan mucho más exigentes.
¿El copiloto es un compañero importante?
En campeonatos como el ERC, es un apartado de vital importancia; no sé si el 50% o más, pero sí es imprescindible para lograr buenos resultados. Edu González ha hecho un trabajo excepcional. Anteriormente me acompañaron Eloy Rivero y Rogelio Peñate, que me ayudaron mucho. Además hay gente del equipo muy importante como José Pérez, Juan Benítez, mecánicos?
