El Gran Canaria Fútbol Sala encajó la segunda derrota liguera consecutiva ante el Manzanares en Ciudad Real después de protagonizar una buena segunda parte en la que rozó el empate (3-2). Un doblete de Juanillo en dos mágicos minutos permitió soñar con un resultado positivo que, sin duda, merecieron los de Suso Méndez por los méritos contraídos durante los 40 minutos del choque. LA PROVINCIA