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Monzón, la gran esperanza

El bicampeón de España sueña con subirse al podio, pero reconoce que "se venderá muy caro" el ganar una posición en la clasificación "por la competitividad que existe"

Luis Monzón y José Carlos Déniz, con el Ford Fiesta R5, durante el 'shakedown' del Rally Islas Canarias celebrado ayer. j. pérez curbelo

Luis Monzón, con el Ford Fiesta R5 y con José Carlos Déniz en el asiento de la derecha, se convierte en la gran esperanza de la afición canaria para luchar por la victoria ante los pilotos europeos y nacionales de élite que se congregan en la 43º edición del Rally Islas Canarias, que arranca hoy.

El bicampeón de España, que lleva un año de inactividad en los rallys, es consciente de la responsabilidad que significa representar al automovilismo isleño, y responder a la ilusión de los muchos aficionados que le apoyan. Su aliento supone un plus para el piloto de Auto-Laca.

Luis Monzón apunta que, en el capítulo de neumáticos, con los Pirelli anda liado. "Cada piloto me cuenta algo diferente, si bien es cierto que la aportación de Iván Ares y Pepe López ha sido muy valiosa para las decisiones que podamos tomar durante el rally conjuntamente con los ingenieros de la marca. En definitiva, me siento con falta de rodaje con el coche y de información de los neumáticos", resume.

Considera que cuenta con una montura competitiva: "El equipo es muy bueno. Al dueño, Miroslav, lo conozco bien. Todo en nuestro coche marca pequeñas diferencias con respecto a los Skoda, Volkswagen, Hyundai y Citroën modernos; todo suma a lo hora de atacar las curvas".

Eso sí, Luis Monzón asume que "estamos en inferioridad de prestaciones". "El Ford Fiesta fue el primero de los R5 en fabricarse, por lo que ha perdido algo de eficacia. Lukyanuk tuvo uno en sus manos hace varios años, y ahora él dispone de material de última evolución", reconoce.

Señala que todo suma "y al final los tiempos deben salir con nuestra aportación", pero confía en la ilusión que tiene por hacerlo bien e intentar hacer disfrutar a la afición que tanto le aprecia.

Jugando en casa

"Correr un rally al año ya de por sí supone una presión añadida. Ese plus de la afición a veces suma y otras no tanto. Exige muchísimo y los pilotos que vienen tienen un alto nivel de pilotaje, de coche y de neumáticos. Hablamos de pilotos que al siguiente año van a estar en el Mundial. Nuestro valor es que jugamos en casa, pero la competencia es muy dura", confiesa Luis Monzón.

Y lanza un mensaje a sus incondicionales: "Paciencia, que tengan paciencia. Para nosotros sería interesante lograr un podio, pero con la fuerte competencia que hay se venderá muy, pero que muy caro, ganar una posición en la clasificación. Vamos a poner toda la carne en el asador y a aportar nuestro granito de arena para contribuir al espectáculo. Lo vamos a intentar".

También se refería Luis Monzón a los tests que ha realizado con el Ford R5: "Con el set up que tiene ahora el coche en suspensiones, diferenciales y frenos, este es muy diferente al de años anteriores; no deja ver los límites. En los tests de Valleseco solo eran segundas y terceras. Como te duermas un poco, te pueden caer un saco de segundos".

Año a año, la organización ha ido innovando en la cita del Europeo de rallys. Apuestas como la de acercar los tramos cronometrados a los centros urbanos se van consolidando. Luis Monzón se muestra a favor de este tipo de acciones.

"Hay gente que va a los rallys y otra que es aficionada pero que por diferentes circunstancias no pueden desplazarse. Creo que es acertado para el automovilismo, y para que las instituciones y los patrocinadores sigan apostando por este deporte. El llevar la prueba a los centros urbanos, manteniendo las medidas de seguridad necesarias, es algo que la gente agradece. El llegar a acuerdos con los diferentes ayuntamientos es muy positivo, ya que a veces se cae en el error de llevar los rallys a sitios recónditos y olvidados, y con eso se pierde en espectáculo", apunta el grancanario.

'Su' rally

La relación del satauteño con este Rally Islas Canarias va más allá de lo meramente competitivo. Cabe recordar su etapa como promotor del evento automovilístico internacional: "Con Germán Morales hacíamos un gran equipo. Yo con la promoción del evento y él con la parte técnica. Desde mi salida, Germán lo ha hecho muy bien también como promotor, apartado que desconocía. Ha consolidado el evento con un alto nivel. Se plantó una semilla que ha brotado con mucho esplendor, llevando a su organización a ser reconocida como una de las mejores de toda Europa".

El Autonómico de montaña es el único certamen que completa Luis Monzón a lo largo de la temporada. El actual campeón regional de la especialidad luchará este curso por revalidar el entorchado, pero no se muestra de acuerdo con la estructura del mismo.

"Resulta carísimo, al diversificarse las pruebas por islas. Resulta muy costoso y no se corresponde con la repercusión publicitaria. Los calendarios están plagados de pruebas de todas las modalidades, hay mucha saturación. Se deberían reducir, pero sería enfrentarte con las organizaciones y ello significa no ganar las elecciones a las Federaciones. Es el pez que muerde la cola. Pienso que los eventos se deben fusionar para abaratar costes y así ofrecer mayor calidad", apunta.

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