Villa Santa Brígida: Ione Puga; Chino, Ángelo, Padilla, Aday; Uday (Álex García, 65'), Fabio (Cristian, 75'), Calem, Pablo Álvarez; Santi y Ojeda (Iván Roque, 70').

Tenerife B: Otaño; Fede, Edu, Christian, Samu; Javi Alonso (Elliot, 77'), Josué, Bolaños, Adrián; Borja Llarena (Tito, 66') y Faridi Mussa (Yuya, 58').

Árbitro: Rayco Marrero García. Expulsó al local Iván Roque (93') y al visitante Josué (90'), ambos por roja directa. Además, amonestó a los locales Uday, Calem y Fabio y al visitante Bolaños.

Un empate sin goles (0-0) entre el Villa Santa Brígida y el Tenerife B privó a ambos equipos de acercarse a los puestos de promoción de ascenso. El cuadro satauteño, de hecho, perdió todas sus opciones, mientras que los chicharreros deberán esperar a la última jornada del campeonato.

La escuadra de Leandro Cabrera Mazinho necesita ganar al campeón, el Tamaraceite, y esperar a lo que ocurra en el duelo directo entre el Lanzarote y el Mensajero y a lo que haga el Unión Viera. Los locales sufrieron varias decisiones controvertidas del colegiado que pudieron desnivelar el marcador a favor.

En una primera parte monótona, el Villa y el filial blanquiazul evitaron conceder espacios a su rival. Se vivió un período inicial intenso, pero con poco juego. Rebasado el cuarto de hora, los grancanarios solicitaron una posible pena máxima por mano dentro del área del visitante Christian.

Poco después, el colegiado anuló un tanto al satauteño Santi por falta sobre el portero Otaño, tras cabecear el balón a la red. Ya en la recta final de la primera mitad, los blanquiazules pudieron irse al descanso con ventaja, pero Samu y Bolaños, con sendas faltas, no estuvieron acertados para batir al arquero local.

Con el receso, el árbitro volvió a invalidar un gol en el que Santi mandó a la red un balón que se le escapó a Otaño tras la ejecución de una falta por parte de Calum. En las postrimerías, Pablo Álvarez cedió para Iván Roque, quien incomprensiblemente marró una clara oportunidad para hacer el 1-0, al mandar la pelota, con todo a favor, manso a las manos del meta visitante. Al final, el empate sin goles no contentó a nadie.