Carla Suárez cerró ayer su participación en el Abierto de Roma, de categoría Premier 5 de la WTA, después de caer por 6-4, 1-6 y 6-3 ante Kiki Bertens, sexta cabeza de serie, en los octavos de final del torneo. Fue un día muy duro para la grancanaria y para el resto de competidoras, ya que afrontaron dos partidos debido a la suspensión de la jornada del miércoles por la fuerte lluvia. Antes de citarse con la holandesa, la tenista isleña se deshizo por la mañana de la francesa Alizé Cornet, después de que esta se retirara con un 6-3 y 3-0 adverso. La otra española del cuadro, Garbiñe Muguruza, también quedó apeada.

Por lo que respecta a la competición masculina, Rafa Nadal accedió a la ronda de cuartos de final del quinto Masters 1.000 de la temporada al ganar al georgiano Nikoloz Basilashvili (6-1 y 6-0) y citarse así en la siguiente ronda con el también español Fernando Verdasco, verdugo del ruso Karen Khachanov (7-5, 3-6 y 6-3).

Pocas horas después de barrer al francés Jeremy Chardy en 66 minutos, el balear necesitaba una hora y dos minutos para vapulear a su segundo rival del día.

Hoy le toca lidiar con Fernando Verdasco, que llega al compromiso más cansado ya que eliminaba por la mañana al austriaco Dominic Thiem y por la tarde necesitó dos horas y 11 minutos para doblegar a Khachanov.

También en la ronda de cuartos estarán los otros dos grandes favoritos, Roger Federer y Novak Djokovic. El suizo, con ganas de resarcirse después de no optar al título en el Mutua Madrid Open, sufría en el segundo duelo de la jornada. El croata Coric le complicó las cosas al helvético, que resolvió la situación en la muerte súbita de la tercera manga.

Por su parte, el serbio, número uno mundial, arrolló al alemán Philip Kohlschreiber y se enfrentará al argentino Juan Martín del Potro en los cuartos de final.