La Provincia - Diario de Las Palmas

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La vanguardia canaria se mide con lo desconocido

Las promesas del tenis autóctono luchan con las perlas europeas sobre la tierra batida de El Cortijo en el Gran Canaria Yellow Bowl

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Gran Canaria Yellow Bowl

Las pistas de tierra batida de El Cortijo Club de Campo son el escenario del mejor tenis juvenil del panorama europeo. Las jóvenes promesas de la raqueta canaria disputan sus primeros encuentros internacionales durante la celebración de la Gran Canaria Yellow Bowl sub 12 y sub 14. Tenistas de varias islas y del viejo continente pugnan por coronarse en este mini Grand Slam.

Las mejores raquetas de la cantera isleña gozan de la oportunidad de medirse en casa con diamantes en bruto extranjeras, ya que el nivel de Grado 1 asegura la presencia de las mejores. Elena Lobo, de Tenerife, sueña con escalar hasta lo más alto. "Si luchas puedes perder, si no luchas estás perdido" es su lema. Admiradora de Rafa Nadal, con apenas 14 años ya ha sido semifinalista de España en individuales y dobles.

Marta Rodríguez también vino de Tenerife para ponerse a prueba ante las mejores. Campeona de Canarias alevín, no teme a nadie. "Las de fuera tienen nivel, pero no nos intimidan". Porque si algo aprenden las nuevas generaciones del deporte es la importancia de lo mental, en confiar en uno mismo. "Es difícil aguantar todo el torneo bien mentalmente, se tienen altibajos", afirma la lanzaroteña Taba-tha Suárez, que incluso va a un psicólogo deportivo.

La grancanaria Isabel García fue recogepelotas en estas mismas pistas cuando no tenía edad para jugar. "Aspiraba a jugarlo, entrené mucho para estar aquí", explica. "Es emocionante que pueda participar, y encima de grado 1", añade la campeona de España benjamín.

Gabriela Paun, grancanaria originaria de Rumanía, entrena en Maspalomas sobre arcilla. "Se nota la diferencia con esta, la del Sur es menos compacta, pero es como jugar en casa", resalta la joven deportista de 10 años. Pese a su corta edad se mueve bien en la pista. "Me gusta cambiarme a derecha invertida cuando puedo".

Victoria Togores es otra de las muchas tenistas que han venido de Tenerife. "Es un viaje más corto de lo habitual", matiza la chicharrera de 13 años con experiencia en el extranjero. "Es una oportunidad de jugar contra rivales nuevos de nivel". Su paisana Paula García, campeona de Canarias en benjamines, también incide en este punto: "Todas las de fuera vienen con un nivel muy alto".

Porque uno de los perjuicios del tenis canario es que al final todos los jugadores se conocen de enfrentarse una y otra vez en los torneos insulares desde prebenjamines hasta juveniles. La costoso de salir a jugar a la Península hace que el tenis se vuelva monótono en las Islas. Por eso torneos como el Yellow Bowl son una gran oportunidad para medir el nivel real de la cantera canaria.

Un prodigio

"Hay que jugar contra los mejores para sacar lo mejor de uno mismo", dice acertadamente Luna di Noto, una de las mayores promesas del tenis autonómico. La lanzaroteña es campeona de Canarias júnior con 13 años y campeona de España de su categoría. "En Lanzarote falta nivel y por eso me fui a Tenerife a entrenar", revela la joven. Di Noto dice no temer a las internacionales. "Entreno con rusas y muchas chicas de fuera, ellas están más nerviosas por jugar lejos de casa", sentencia la aspirante al triunfo en sub 14.

Daniela Fernández y Uxue Azurza viven en Tenerife. "Es el torneo más importante que he jugado", asegura Daniela, que tendrá que recuperar los deberes cuando regrese. "Estoy faltando una semana, pero el tenis lo merece". Azurza, originaria de San Sebastián, pasó la previa para acceder al cuadro principal. "Las extranjeras pegan muy bien, tengo ganas de seguir avanzando".

Xiomara Estévez, de Tenerife, también superó la previa. "Fue emocionante jugar la fase final, aunque perdí en primera ronda y ahora juego consolación". Su coterráneo Samuel García espera estar su mejor nivel "de tenis y mental" para seguir vivo en la competición. "Hay mucho nivel, está difícil", advierte.

Por último, los grancanarios Óscar Morales, Zara Cabrera y Mireia Bethencourt reconocen que las foráneas despliegan un tenis "difícil de encontrar" en la Isla. "Está bien medirse con desconocidos, porque juegas partidos muy diferentes a los habituales", sentencia Morales.

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