"Sé que no era la manera en que mi hijo tenía que haber actuado", asegura la madre de Kevin, el joven que trató de agredir al árbitro el sábado pasado tras el partido de benjamines entre El Calero y El Doctoral, jugado en el campo de este último equipo. Ella, a quien se ve tratando de aplacar los ánimos del muchacho en el vídeo del incidente grabado por un espontáneo en el campo de El Doctoral, pide perdón por lo ocurrido y reclama comprensión. "Mi hijo es una bella persona, a la que le pierde la impulsividad", dice.

Kevin, que tiene 28 años y es padre de uno de los jugadores del equipo benjamín del club El Calero, tiene dificultades para controlar sus impulsos y, por ello, "está siendo tratado, con medicación y psicólogo", según ha manifestado la madre en el programa Al Descubierto Radio Show, de Radio Aventura Siglo 21. La mujer, que ha intervenido en dos ocasiones en la emisora en los últimos días, una de ellas entre lágrimas, muestra su pesar por lo ocurrido y confiesa que ha sentido mucho dolor por los comentarios vertidos en redes sociales a raíz de la difusión del vídeo del percance.

En el programa también ha intervenido Kevin, quien reconoce que se encuentra "en tratamiento", y pide disculpas a los presentes en el partido de benjamines, "sobre todo a los niños". También se queja de un maltrato del árbitro hacia su pequeño, que fue el detonante. Él se dedicó durante el partido a protestar por ese maltrato y "a aguantar a los padres" que lo mandaban a callar cada vez que alzaba la voz. El testimonio de su madre lo corrobora. "Algunas personas estuvieron todo el partido picando y mi hijo reventó", comenta.

Con la situación y que "no tomé lo que tenía que tomarme para tener la cabeza estabilizada, perdí los nervios de una manera vergonzosa, la verdad", explica un Kevin arrepentido. "El lugar no era el adecuado para perder los nervios", manifiesta e insiste en pedir disculpas "a los niños, a los padres y al club deportivo El Calero", que lo ha denunciado por intento de agresión a un árbitro.

Su madre considera que ha habido demasiada polémica con el asunto y piensa que no fue para tanto, dado que Kevin "no levantó la mano a nadie". También censura a la persona que grabó el vídeo y le pide que se ponga en su lugar. El hijo, a su vez, lamenta que le grabaran en ese acto "vergonzoso" y que haya salido en redes y en los medios informativos, si bien muestra su respeto hacia quienes graban y el periodismo.