Mercedes sigue acaparando la atención en el inicio de la pretemporada de la Fórmula 1, bien por sus coches, por los rivales que montan sus motores o por sus inventos, el último de los cuales causó sensación ayer en el Circuito de Barcelona-Cataluña.

La sopresa llegaba en la tanda de la mañana en los primeros tests del curso 2020 que se están desarrollando en el trazado catalán. La cámara subjetiva del coche de Lewis Hamilton mostró cómo el inglés cada vez que tomaba una recta tiraba del volante hacia sí.

Se trata de un sistema en el que el piloto tira longitudinalmente del volante hacia sí cada vez que toma una recta y lo recoge en las curvas, provocándose una ligera convergencia de las ruedas delanteras; con ello se podría gestionar mejor su temperatura y reducir la resistencia al aire, por lo que mejoraría la aerodinámica del coche.

El director técnico de Mercedes explicó sobre la legalidad del invento que ya estaba hablado con la FIA y que la normativa permite ajustes en los sistemas de dirección. Donde es mucho más rígida la normativa es en las suspensiones cuando el coche está circulando, ya que aquí es donde el piloto no puede incidir con ningún mecanismo.