La Transgrancanaria 2020 conocía en la mañana ayer a su primer ganador, y para nada desconocido. Luca Papi, señalado cono el gran favorito a la victoria después de haberse adjudicado el triunfo en la modalidad 360º en dos de las tres últimas ediciones, cumplió con los pronósticos y acababa de nuevo primero el gran reto.

El italiano se impuso en la meta del Faro de Maspalomas de la prueba de ultradistancia, que recorría desde el pasado miércoles la isla de Gran Canaria a lo largo de 262 kilómetros.

Lo de Luca Papi ya sorprende a pocos. Sumó su tercer triunfo y su cuarto podio en las cuatro ediciones de esta 360º. En el año 2017 compartía victoria con su compatriota Peter Kienzl entrando juntos en meta. Se subía al tercer escalón del cajón en 2018 y conquistaba la victoria en solitario en 2019. Ayer repetía la gesta y colocaba su nombre, una vez más, en el palmarés.

El italiano mantuvo durante muchas horas de la prueba un mano a mano con el japonés Osada. Tras dejar atrás al nipón, tuvo que aguantar entonces la presión del corredor grancanario Esteban García, que finalizaba en una más que meritoria segunda plaza.

Después de ellos, Oliver Quintana, Eugeni Roselló y Jonatan Santana entraban en la línea de meta del Faro de Maspalomas para completar las plaza de honor de esta exigente modalidad 360º de la Transgrancanaria.

El corredor vasco Imanol Aleson entraba sexto. Al cierre de esta edición, Aarón Jacob debía ser el siguiente en finalizar la exigente carrera, por delante de Marta Poretti, primera fémina.

Luca Papi, que nada más cruzar la línea de meta declaraba su intención de volver a intentar la machada de conectar los 262 kilómetros de la 360º con los 128 kilómetros de la modalidad Classic como ocurriera en 2019, finalmente no pudo hacer el doblete.

El corredor italiano cubría las 360º por debajo de las 51 horas (50.59:45), mientras que el grancanario Esteban García hacía un crono de 51.51:59. "Estoy muy cansado, he sufrido mucho, diría que esta ha sido la más dificil de todas las que he hecho", afirmaba el ganador poco después de pasar la línea de meta en el Faro de Maspalomas.

Esta prueba de la Transgrancanaria sigue calando en los más hondo del corazón del atleta transalpino. "Cada año que vengo veo cosas nuevas, es lo particular que tienen esta carrera, que siempre descubro nuevos sitios", reafirma el rey de la 360º.