Canarias y El Hierro dieron un paso más dentro de la 'nueva normalidad' que llega poco a poco. Ayer, el municipio de La Frontera y la isla de El Hierro pasaron su particular test, con el primer partido de fútbol con público en las gradas. Era un examen de fin de curso exigente para los responsables de la Federación Canaria de Fútbol, el Ayuntamiento de La Frontera y el Cabildo y su consejería de Deportes. La prueba se superó con nota y todos los procedimientos de seguridad que se habían fijado funcionaron perfectamente en un modesto campo de fútbol que es historia ya en España.

Este domingo llegará la revalida con el segundo enfrentamiento de la promoción de ascenso a Segunda B, con el enfrentamiento entre la SD Tenisca y el San Fernando (11.00 horas). En este partido se prevé una notable presencia de animosos aficionados palmeros, circunstancia que ha obligado a montar un perímetro de seguridad con agentes de los grupos rurales antidisturbios, trasladados desde la isla de Tenerife, y los agentes de la Policía Local de La Frontera.

Aunque en las redes sociales se alertó, durante el primer partido, que los casi 300 asistentes no guardaban la distancia de seguridad interpersonal, las criticas fueron acalladas rapidamente por la propia Federación Canaria a través de un comunicado que era ilustrado con un vídeo en el que se veía claramente como se guardaba la distancia de seguridad entre los asistentes, quienes también estaban obligados a llevar mascarilla, pese al calor reinante.

Acceso escalonado del público a la instalación, toma de temperatura a la entrada, entrega de monodosis de gel hidroalcohólico o un circuito cerrado de tránsito con el fin de evitar contactos frontales, fueron algunas de las medidas de seguridad que se pusieron en marcha para un publico que cubrió el 40% del aforo de la instalación -unos 300 aficionados-. En el amplio dispositivo de seguridad intervinieron casi un centenar de efectivos de Cruz Roja, Protección Civil, Policía Local, personal de distintos departamentos del Ayuntamiento de La Frontera, todos ellos bajo la coordinación de un eficiente Francisco Javier Vázquez (director técnico del Comité Técnico de Árbitros de Tenerife) y persona designada por la Real Federación Española de Fútbol para coordinar la seguridad.

No estuvieron exentos de las medidas de seguridad los futbolistas, que accedieron al campo por otra vía, después de que 48 horas antes pasaran el test del coronavirus en las dependencias de las respectivas mutualidades de futbolistas de las dos provincias.

Ni siquiera se dejó al albur el desalojo de la instalación, que se realizó de manera ordenada y por secciones por parte de un público hambriento de ver futbol en directo y de aportar su ánimo, que tenía que portar invitación personalizada y documentción de identidad.