Por 43 segundos. El Pueblo Guanche Hospital La Paloma (1:09:53) se hizo ayer con el primer título de la temporada al vencer en la regata final del XLI Torneo Eliminatorio de La Caja de Canarias. La tripulación que patronea José Marí Ponce se impuso en la prueba decisiva al Estibadores Portuarios (1:10:36) y al Unión Risco Navieras Armas (1:23:26)) en una regata que mantuvo la emoción hasta escasos metros de la llegada.

Los tres botes en liza se encontraron con unas excelentes condiciones para la navegación a lo largo de todo el campo de regatas. En la salida de La Marfea el viento se presentó con fuerza 3.5 de dirección nordeste, uniéndose a la fiesta en el primer tramo, las buenas condiciones de la mar. El Unión Risco, de Gustavo del Castillo inició las hostilidades con una ceñida perfecta y buscando las primeras bocanadas de viento.

El Pueblo Guanche, le siguió para posicionarse a barlovento y por último tomó la salida el casco 'rojillo' del Portuarios con Juanjo Díaz de patrón. La primera ruptura vino de la caña del Unión Risco, que decidió virar hacia el litoral. La respuesta fue inmediata por parte del Guanche y el Portuarios. A continuación, los tres botes navegaron en sintonía buscando el viento fresco de la tierra a la altura de la playa de Aguadulce. Sin variar el orden de salida, pero ya con el Pueblo Guanche quitando el barlovento al Risco y algo más a sotavento el Portuarios.

Primeros marcajes

Esta ruptura de hostilidades entre los tres cascos iba a marcar una fase crucial de la regata. Así en el próximo encuentro de las embarcaciones a la altura de San Cristóbal, ya se empezó a ver los primeros marcajes entre el Unión Risco y Pueblo Guanche, ya que el Portuarios de Juanjo Díaz se quedó algo rezagado.

Cada repiquete del Pueblo Guanche era respondido por el Risco, hasta que los dos botes navegaron a la altura de San Cristóbal, donde el Risco decidió no virar hacia tierra y abandonar al Guanche, que se presentó en 'Las Cañas' en solitario.

El viento decayó cuando los tres botes se aproximaron a la bahía. Fue entonces cuando el Risco se descolgó definitivamente y volvió en la pelea por el triunfo el Portuarios. El desenlace fue del todo emocionante. La diferencia era escasa y el viento había desaparecido. El Guanche mantuvo su margen de diferencia y controló a su rival hasta la meta. Su victoria provocó la posterior celebración de la tripulación y aficionados que esperaban en la base náutica.