De tanto ganar, a base de martillear las canastas de todo rival que se cruzara en su camino, Juan Carlos Navarro ha tiranizado la ACB durante los últimos tres años. Él es la referencia de un FC Barcelona Regal que, en este periodo, ha acumulado títulos de campeón en Liga, Copa del Rey, Supercopa y Copa de Europa al ritmo que marcaba su batería de recursos para reventar defensas y sumar puntos.

Ante un dominio tan exagerado, pese al milagro firmado en 2010 por el Caja Laboral capitaneado por Fernando San Emeterio en la final de la ACB, al Real Madrid, al eterno rival del Barça, le ha tocado resignarse ante la infalibilidad de un jugador superior, tocado por un don extraordinario para jugar al baloncesto. Ni siquiera con Ettore Messina al mando pudo el club blanco finiquitar el dominio de Juan Carlos Navarro, el rey de la ACB.

El cierre patronal de la NBA, suspensión eventual -de momento-, ha permitido al Real Madrid elevar su apuesta para destronar al FC Barcelona Regal con el fichaje de Rudy Fernández. El alero, contratado hace unos meses por los Mavericks de Dallas antes de iniciar su defensa del título, se ha sumado a un ambicioso proyecto, en el que coincidirá con jugadores de primer nivel como Jaycee Carroll, Felipe Reyes, Sergio Llull, el tinerfeño Sergio Rodríguez, Nikola Mirotic, Martynas Pocius, Carlos Suárez, Ante Tomic o Novica Velickovic, todos bajo la dirección de Pablo Laso.

El regreso de Mickeal

Señalado como el rival a batir, el Barça no ha desaprovechado la primera oportunidad para volver a imponer su ley: en la Supercopa celebrada la semana pasada en Bilbao defendió con éxito el primero de los tres títulos ganados el pasado curso.

Con Xavi Pascual en el banquillo, el conjunto azulgrana ha retocado su plantilla con los fichajes de Marcelinho Huertas, Chuck Eidson, Xavi Rabaseda y CJ Wallace para mantener muy por encima de la media el nivel de un equipo que, por encima de todo, recupera a Pete Mickeal y que sueña con un cierre patronal definitivo en la NBA para juntar a su excepcional equipo a Pau y Marc Gasol.

Y tras los clubes futboleros, tres serias alternativas: Caja Laboral, Bizkaia Bilbao Basket y Unicaja Málaga.

Al Caja Laboral le ha tocado reinventarse con Dusko Ivanovic al mando. También ha pescado en la NBA con las incorporaciones de Kevin Seraphin (Wizards de Washington) y Reggie Williams (Golden State Warriors). Subcampeón el curso pasado, el Bilbao Bizkaia mantiene su apuesta a lo grande con las incorporaciones de Grimau, Raúl López y D'or Fischer. En Málaga, Joel Freeland empieza a adquirir rango de jugador franquicia rodeado de Fitch, Rowland, Valters o Darden.