Víctor Laguardia Cisneros (Zaragoza, 5-11-1989) llegó ayer a Gran Canaria y superó con éxito el reconocimiento médico que tuvo lugar en las instalaciones de la Clínica del Perpetuo Socorro. El marcador central, que se ha comprometido con la UD hasta junio del 2012, afronta el reto de triunfar de amarillo mirando a la Primera. "Con trabajo, todo es posible. Hay un bloque interesante, forjado con tintes de veteranía y juventud que nos puede llevar lejos", concretó ayer el futbolista de 22 años que viene en calidad de cedido por el Real Zaragoza.

Cuestionado por si suponía una decepción, el hecho de quedarse sin ficha en el club maño y terminar en Segunda, Laguardia fue contundente. "Vengo a un club histórico y con un proyecto atractivo", valoró.

Además, restó importancia a la circunstancia de llegar para cubrir la baja del capitán David García que sigue lesionado. "No me considero el recambio de nadie; vengo a aportar mi estilo de trabajo y a sacrificarme por mis nuevos compañeros".

Laguardia, que ha completado toda la pretemporada con el Zaragoza, incluso una gira por Inglaterra, afirmó que está al cien por cien de su lesión de menisco. "Tras la operación me incorporé a la dinámica de trabajo sin problemas; llego en un gran momento y con ganas".

Elogios a las perlas

Laguardia tuvo un mensaje de reconocimiento y admiración por el trabajo y valía de Jonathan Viera y Vitolo. "Hablamos de jugadores con una gran habilidad y con Vitolo coincidí en una convocatoria de la selección nacional sub-19. No me sorprende el nivel que están ofreciendo en Segunda División con la UD".

El central completará hoy su primer entrenamiento en Barranco Seco y será presentado. Tras un paso efímero por la liga de las estrellas con el Zaragoza, llega con la misiva de dejar huella en el universo de plátano. "Adoro los retos", finaliza.