Kenji Fukuda, que militó en la Unión Deportiva Las Palmas en la temporada 2007-08, dijo hoy en una emisora canaria que su familia y él están "bien", después del terremoto y del tsunami que se produjo en su país.

Fukuda desveló que en el momento de los movimientos de tierra se encontraba en Tokio subido en un autobús y que sintió "muchísimo los temblores", aunque salió ileso.

El delantero nipón afirmó que más problemas tuvo su padre, que vive en la zona donde ocurrió el terremoto, y al que tardó en localizar. "Durante dos días no supe de su paradero. Fueron momentos que viví con mucho sufrimiento y preocupación", afirmó.

"Afortunadamente ya he podido hablar con él y me ha dicho que se encuentra bien, aunque está durmiendo en el coche", agregó.

Asimismo, el citado jugador japonés, quien actúa en un conjunto de la Segunda división de su país, reconoció que existe miedo debido a las fugas radiactivas producidas en la central de Fukusima.

Fukuda agradeció asimismo toda la ayuda internacional que están recibiendo, para contribuir a que todo vuelva a la normalidad.