Miguel Ángel Ramírez, presidente del consejo de administración de la UD Las Palmas, manifestó ayer a este medio que las obras del nuevo proyecto del Estadio de Gran Canaria deben ser financiadas por el Cabildo, ya que es el ente el propietario del recinto. "El estadio es propiedad del Cabildo y quién tiene que pagar la obra es el Cabildo. Como ocurre en todas la ciudades de España. Ese recinto se nos dio con una ciudad deportiva inacabada y queremos que la termine", sentencia.

Para Ramírez, la determinación de edificar una de las torres del Estadio antes que eliminar las pistas de atletismo corresponde únicamente al club amarillo. "Las prioridades las ha puesto la UD, no el Cabildo".

El dirigente abre la puerta al consenso, ante la demanda de los aficionados de suprimir las pistas de atletismo del recinto deportivo. "Los técnicos del Cabildo y los de la UD Las Palmas estudiaremos todas las posibilidades de llevar a cabo lo de las pistas. Será el Cabildo el que decida cuál es la mejor opción".

Además, el presidente de la UD Las Palmas sale al paso del posicionamiento crítico del grupo político de Nueva Canarias. Con ellos ya habíamos iniciado conversaciones para construir la torre. Es lo más inmediato".

En otro orden de cosas, el dirigente detalla que el ente cabildicio debe encontrar una ubicación para que los equipos de hockey pueden seguir entrenando. "Tienen que trabajar para ubicar a los equipos de hockey en otro lugar, antes de iniciar la ciudad deportiva", argumenta.

Sede moderna

Ramírez no esconde la importancia de que la UD Las Palmas cuente, en la torre del estadio que da a la calle de Fondos de Segura, con una nueva sede que sustituya a la actual de Pío XII. "En un plazo de tres a cuatro meses, se podrá empezar a trabajar en el inicio de las obras. No podemos hacerlo al revés -en el sentido de iniciar primero la supresión de las pistas- porque si no se tarda un año y medio. La UD Las Palmas necesita su sede y la ciudad deportiva".

La palabra del presidente del Cabildo de Gran Canaria, José Miguel Bravo de Laguna, y su fe ciega por el proyecto sigue latente en la cabeza de Ramírez. "No dudo del compromiso del presidente del Cabildo".

El presidente del consejo de administración de la UD Las Palmas insiste en que la hoja de ruta pasa por iniciar el proyecto por acondicionar el edificio. "Es la prioridad; al igual que la fábrica de nuevos jugadores. Las pistas de atletismo, por su parte, se eliminarán cuando se termine el edificio y luego llegará el turno de la ciudad deportiva".

Sobre el posicionamiento de Carolina Darias, portavoz del grupo socialista en el Cabildo y que había manifestado que esperaría a que se concretase el proyecto y sus costes, Ramírez responde que "agradecemos su prudencia".

Para Nueva Canarias, que trasladó al debate del pleno insular del Cabildo, los costes de la obra del Estadio, Ramírez concluye que "estamos seguros de que ellos quieran el bien para la UD Las Palmas. Tal vez Carmelo Ramírez -portavoz de Nueva Canarias- no sabe que su propio partido político hace un año quería iniciar la obra del edificio. Pediré una reunión con los partidos de la oposición para explicarles el proyecto. El reto es de todos y apostamos ciegamente por el consenso".

La voz de la afición

Ramírez, que se encuentra de vacaciones fuera de la Isla, valora el cariño y el esmero de la afición amarilla por seguir creciendo en un marco diferente y más competitivo. "La afición confía plenamente en que su presidente sacará este proyecto adelante. Al día siguiente de ganar las elecciones, el presidente Bravo de Laguna me transmitió que cumpliría con su palabra. Y sabemos que este proyecto nos beneficiará a todos", aclara.

Tras fijar los plazos, de cara a la construcción de la torre, que albergará la nueva sede de la entidad, así como un restaurante, el museo y dependencias para las peñas, Ramírez tampoco cierra la puerta a hilvanar un proyecto firme en torno a la cantera. "La ciudad deportiva es la piedra angular y también hemos pensado en la residencia. Cada cuestión a su debido tiempo pero siempre con la bandera del consenso; la afición está con su presidente y eso es clave".

El nuevo proyecto de la UD se sustenta en el compromiso del grupo popular que ahora gobierna el Cabildo. Según Ramírez, dentro de tres o cuatro meses se iniciaría el trabajo. La UD ya divisa las directrices del futuro.