El seleccionador nacional Luis Enrique Martínez se mostró feliz por el partido realizado este martes ante Alemania, una buena prueba de que su optimismo sobre su equipo "no era ninguna pose", y deseó que pueda servirles como "un impulso".

"El partido me alegra por los jugadores porque el resultado no deja de refrendar lo que trabajas y buscas en los partidos. En los anteriores no hemos llegado al resultado, quizá porque tampoco fuimos precisos, pero dije que era optimista y no era ninguna pose", apuntó Luis Enrique en rueda de prensa tras el partido.

El asturiano cree que el bueno partido puede servir para que "quizá la gente se ilusione" y que para "los jugadores es un gran refuerzo". "Pero no por dudas sobre su nivel, que saben que lo tienen. Nuestro objetivo es llegar a la 'Final Four' y creo que esto debe significar mucho para los jugadores y eso espero, que tengan ganas de volver en marzo", indicó.

"Espero que este partido sea un impulso. Yo he transmitido siempre que lo que veía me gustaba y como refuerzo creo que viene muy bien. Hemos planteado el partido como si fuera uno de cuartos de la Eurocopa, y el equipo y los jugadores han estado de sobresaliente", admitió.

Además, dejó claro que la buena actuación debe servir a los jugadores "para no relajarse", pero aclaró que ninguno de los de hoy tendrá alguna ventaja porque "para poder venir saben que deben estar en forma y que deben jugar aunque haya excepciones". "El mejor mensaje para este grupo de 'treintaypico' es que para venir aquí tienen que volar en sus clubs, eso creo que es lo más justo", subrayó el gijonés.

Luis Enrique sintió "lo mismo que todos los aficionados: felicidad y alegría". "Para nosotros es muy importante por lo que significa volver a la senda de la victoria a través de un buen partido, de buen juego y por el refuerzo que significa para los jugadores", remarcó.

"Desde dentro sentimos que en esta fase no hemos merecido perder ningún partido. Hemos marcado 13 goles y encajado sólo tres, ahí están los números, a partir de ahí cada uno puede sacar sus conclusiones, pero yo me voy fiando de lo que voy viendo en cada partido", añadió el seleccionador.

Este no quiso personalizar en ningún jugador y se acordó de los 26 que han formado la convocatoria. "Esta es la idea. Ha habido jugadores que han estado a un nivel altísimo, pero para poder presionar y minimizar a una selección como Alemania necesitas del trabajo colectivo. Hemos conseguido que no apareciese ninguno de sus jugadores del medio y del ataque, el plan estaba claro y no ha cambiado en los 95 minutos, y esa es otra cosa que me hace sentirme orgulloso porque no especulamos y seguimos en nuestra línea salga mejor o peor", expresó.

"Sabemos en qué país estamos y aceptamos cualquier situación. Ni ahora somos tan buenos ni antes tan malos cuando decían que había falta de gol. Lo importante es centrarse en lo que uno puede controlar y no pensar que eres el número uno cuando van bien las cosas ni el 0 cuando van mal", sentenció el técnico, que "ni mucho menos" cree que se haya sido injusto con el equipo y mucho menos de una afición de la que siempre ha recibido "cariño y apoyo".